SKZ Dance Academy

8

Estaba ensayando mi rutina, prestando mucha atención en el espejo a mis movimientos.
Decidí tomar un pequeño descanso por lo que tomé mi botella de agua y apoyé mi frente en la pared disfrutando del cambio de temperatura, cerré los ojos por unos segundos... cuando unas manos rodeando mi cintura me hicieron brincar en el lugar asustado.
Rápidamente me deshice del agarre y volteé para toparme con Jeongin, quien me dedicaba una sonrisa pícara.
-Siento haberte asustado Hyung - fruncí el ceño observándolo, no tenía cara de arrepentirse de nada... pero más importante aún... de dónde había salido?
Me alejé de él, dando la vuelta para evitar quedar arrinconado en la pared... no le temo a Jeongin... pero... soy precavido por naturaleza. Lo miré y me sentí un poco nervioso al verlo con las manos en los bolsillos, muy cerca de mí, y con esa sonrisa de lado que me indicaba que sus intenciones no eran buenas...
¡Es solo un niño Hyunjin... no imagines cosas!
El curso de mis pensamientos fue interrumpido cuando sentí un rocé ascendente por mi columna provocando un escalofrío en mi cuerpo, a la vez que oía una gruesa voz.
-Hyung... Jeongin te está molestando? - Changbin!!... me giré veloz para toparme con Changbin, mordiéndose el labio inferior y irrumpiendo en mi espacio personal, lo que me hizo retroceder, haciéndome chocar con Jeongin a mi espalda. Di un respingo al sentirme acorralado.
Escapé por un lado y ellos continuaban con esa sonrisa provocadora en los labios.
Esto no me estaba pareciendo divertido... me estaba enfadando y... comenzando a asustar... solté un grito cuando fui rodeado por dos pares de brazos, dejándome prisionero entre dos pechos.
-Hyung... no te gustaría jugar con nosotros? -la voz de Minho en mi oído y la sonrisa lujuriosa de Felix me hicieron retorcerme en el lugar, intentando escapar... en vano.
Changbin y Jeongin se acercaron lentamente... Changbin levantó mi barbilla y me sentí totalmente asustado cuando identifiqué el deseo en sus ojos.
-Hyunjin Hyung... nosotros solo queremos jugar... contigo... nos dejas? - seguía forcejeando mientras la adrenalina corría por mi cuerpo... nunca me había sentido tan impotente... no podía escapar.
Un cálido aliento acarició mi nuca, sentí un cuerpo pegarse al mío, sin dejar espacio entre nosotros, haciéndome sentir aún más miedo.
-Hyung no me prometiste que tendrías cuidado... - Baby Seung? El susurro en mi oído me hizo girar la cabeza y toparme con sus ojos.
Por qué demonios Seung tenía la misma expresión lujuriosa de los demás chicos?... asustado intenté escapar una vez más, consiguiéndolo en este intento.
Logré llegar a la puerta y la abrí rápidamente solo para encontrarme con los mismos cinco chicos y sus sonrisas traviesas enfrente de mí. Grité asustado.
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Abrí los ojos y me incorporé jadeando en la cama...
Todo había sido un sueño... más que un sueño fue una pesadilla.
Pasé mi mano por mi frente... estaba todo transpirado... malditos niños!!!
Tomé mi móvil para ver la hora, y noté que Seung no estaba en la cama... se habría levantado ya?
Faltaban 10 minutos para que sonara mi alarma.
Esos malditos riquillos me habían robado diez minutos de sueño... me lancé en la cama frustrado mientras pataleaba.
Sonreí malicioso.
Hoy me la iba a desquitar en las clases.
Me levanté buscando a Seung por todo el lugar y solo encontré una nota sobre el desayuno en la mesa.
Hyung nos vemos en la academia,
por favor come lo que preparé para ti
que noté que estas más delgado
Te quiero mucho
Tú Baby Seung
Oh por dios!!! Puedo enmarcar esta nota? Tan tierno!!
Suspiré sonriendo.
Pero bueno más que todo creo que esto me servirá de chantaje en un futuro.
Con una sonrisa en el rostro tomé el desayuno para luego alistarme para ir a trabajar.
Estaba emocionado con mi trabajo... pero después del sueño de anoche... creo que hasta ver a Seung se me iba a hacer difícil.
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-Quiero que hagan 30 minutos de trote alrededor del salón para ir calentando ok!! - nos encontrábamos ya en la sala de ensayos, por suerte los chicos habían sido puntuales. Me miraron con caras de incredulidad... qué acaso nunca habían corrido?
-Hyung no somos niños pequeños - protestó Jeongin con un puchero que solo me hizo pensar en que parecía un niño de verdad. Sonreí divertido por su actitud.
-Tienes razón Jeonginnie - vi un leve sonrojo en sus mejillas ante el apodo que le di, al mismo tiempo que sentía una mirada matadora por parte de Seung - es verdad que no son niños por lo tanto... en vez de 30 minutos será una hora y correrán alrededor de la academia... contento? Gracias Jeonginnie - cinco bocas abiertas fueron el resultado de mis palabras. Sonreí complacido y les pedí que me siguieran. Pude escuchar un "Sí, muchas gracias Jeongin" seguido de varios resoplidos que solo ampliaron mi sonrisa.
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Me acomodé en el banco desde el cuál me encontraba supervisando la carrera de los chicos... ya quedaban menos de 20 minutos... y se veían como si hubieran hecho la maratón... el clima soleado no los había ayudado mucho.
Suspiré complacido. Realmente puede que les gustara bailar... pero su rendimiento físico dejaba mucho que desear.
El sonido de un auto a mi espalda me hizo voltear y ver a una hermosa mamá Kim descender y dirigirse hacia a mí, me hizo desconcentrarme un poco de los chicos... que por supuesto aprovecharon para tomar un descanso.
-A correr!!! O quieren que les doble el tiempo? - no había terminado de decir mi amenaza cuando salieron como flechas... excepto Seung que miraba con el ceño fruncido a su máma - corriendo Seungmin!!! - lo miré serio.
-Pero Hyung mi mamá... - protestó puchereando. Lo siento Seung pero eso no sirve conmigo y las clases.
-Quieres hacer el doble del tiempo? - me lanzó una mirada de enfado y siguió a sus compañeros que lo habían dejado atrás.
Suspiré y me volteé a atender a mamá Kim que se encontraba ya a mi lado.
La abracé y besé su mejilla, deleitándome con el suave perfume que destilaba. Kim Sasha era el ejemplo de lo que una dama debe ser... o por lo menos fuera de casa. Sonreí al recordar su vestimenta y conducta cuando estamos solos en casa.
-Jinnie, sabes que dicen que las personas que ríen solas, de maldades se ríen? - me hizo un puchero, poniendo la misma expresión de su hijo instantes atrás.
-Solo recordaba tu vestimenta en casa señora Sasha - un tierno sonrojo se adueñó de sus mejillas, haciendo que ampliara mi sonrisa y le guiñara - qué te trae por aquí mamá Kim?... viniste a ver a Seung o a tu dumpling favorito?
-Claro que a mi dumpling favorito - apretó mi cachete - estoy cansada de ver al amargado de mi hijo... - hizo un gesto desdeñoso- quería avisarte que decidí hacer una cena en la casa para ti y para los chicos... para que se vayan conociendo mejor. Te gusta la idea?
La sonrisa fue abandonando mi rostro a medida que pensaba en... lo incómoda que podía ser esa cena... además... después del sueño de anoche no estaba muy... digamos... relajado en la presencia de los riquillos... incluyendo a Seung.
-No creo que sea... - Sasha ignoró mi intervención y agarrándome del cachete nuevamente me dijo:
-Te espero hoy a las 7 para la cena, díselo a los chicos, estoy segura de que si viene de ti la invitación ellos van a ir - fruncí el ceño.
-Yo no creo que... mejor díselo tú, mamá Kim... es tú casa... tú cena - yo guardaría la esperanza de que estos diablos tuvieran otros compromisos.
-Está bien mi huroncito... yo se los digo, si me prometes que comerás ración doble en la comida... te veo muy delgado... has perdido tus cachetotes de bebé - me sonrojé con las palabras de Sasha quien diciéndome tierno me abrazó.
Ambos nos sentamos en el banco que anteriormente yo estaba ocupando, y conversamos otro poco de los últimos 5 años.
Pasaron volando los 20 minutos con tan buena compañía.
Los chicos se acercaron con caras de cansancio extremo y todos sudados.
Y pensé que sin dudas, esta debía ser una rutina a mantener.
Sus ropas estaban pegadas a sus cuerpos delineando cada curva y músculo de los mismos... y por dios con los cuerpos de estos niños!!!
Quedé embobado, sentía la garganta seca... estoy seguro que así debía lucir el paraíso gay!!!!
Todos estaban muy pero muy bien... los brazos descubiertos de Felix... el abdomen transparentado a través del pullover de Jeongin... los muslos de Minho... los brazos de Changbin... el trasero de Seung...
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Seung?... Oh por dios que bajo he caído!!!
Me golpeé mentalmente al darme cuenta de que estaba comiéndome con la vista literalmente a 5 niños que podían ser mis hermanos... de hecho uno lo era.
La voz de Kim Sasha me volvió a la realidad, cuando repitió mi nombre al verme embelesado.
-Disculpelo señora Kim... creo que está disfrutando de la vista - mi cara enrojeció al oír el comentario de Changbin, y todos sonrieron, excepto Seung, con sus palabras y mi reacción.
-Soy humano - susurré y me encogí de hombros.
-Hoy en la noche haré una cena para que ustedes niños y Jnnie se conozcan un poco más, qué les parece? - mamá Kim soltó sin más, ignorando mi incomodidad.
-No - la voz fuerte de Seung se hizo presente, lo miré frunciendo mis cejas - no quiero a estos en mi casa. - señaló despectivo a sus compañeros. Me quedé un poco sentido con su brusquedad con los chicos, pero luego recordé que se llevan bien, a pesar de las apariencias.
-No es tú casa, es mía, y se hace lo que yo quiera... y quiero esta cena- tras la palabra de mamá Kim los chicos sonrieron burlones - además tú lo que no quieres es que estos hermosos niños estén cerca de Jinnie... acaso tienes miedo de que te adelanten? - quedé algo confundido en la conversación... qué se le adelanten en qué?
Acaso Seung pensaba que les daría clases en otro momento y ellos lo adelantarían en el baile?
Miré a Seung buscando una respuesta y solo lo ví mirar enfurruñado a su mamá, mientras los otros continuaban burlándose de él.
-No sé de qué hablas... - oí a su mamá resoplar - haz lo que quieras ya que no tengo ni voz ni voto. - dijo enfurruñado otra vez.
-Entonces no te cuento para la cena? - los chicos y yo mirábamos de un lado a otro durante la conversación... ellos sin perderse detalle... y yo un poco cohibido... no me gustaba que Sasha regañara a Seung. Suspiré, lo que hizo que todos me miraran.
-Allí estaré - dijo Seungmin apretando los puños e intimidando a los riquillos con su mirada.
-Ok entonces a las 7 en mi casa... cena en honor a Jinnie y sus nuevos alumnos.
Todas las miradas volvieron a caer sobre mí... y de pronto me sentí de nuevo como trasladado a mi sueño...
Creo que en serio esto de la cena no es buena idea...