Papá, no olvides 13 para llevar - SVT

07= Papá Joshua

—Papá...

—No.

—¡Pero, papá!

—Dije que no. Omitiremos ese pasillo, así que dejen de insistir.

Soonyoung y Jun emitieron el mismo puchero en contra de que su papá Joshua no les permitiera que dieran un vistazo al pasillo de dulcería.

Sabía de antemano que, por mucho que quisiese, tendría que llevar una bolsa de caramelos diferentes para todos y tomando mas de la cuenta que tenía designada para gastar en el supermercado.

Sí, debían huir de allí.

—¡Mira, Soon! —gritó Jun— ahí es donde regalan cuadritos de jamón.

Joshua abrió la boca tan pronto notó que los niños divisaban los refrigeradores en el área de embutidos.

Aquellos torbellinos salieron corriendo de ahí para llegar hasta la señorita que repartía las muestras gratis de los productos. 

Wonwoo y Woozi los siguieron de cerca y no quedó más remedio que acercarse también, llevando consigo el carrito que cada vez iba más lleno.

—¿Podría darme otro? —pregunto Wonwoo. A sus espaldas escuchó un carraspeo de parte de su papá, por lo que se encogió de hombros— ¿Por favor?

Joshua sonrió orgulloso. Siempre era cuidadoso con los modales que sus niños expresaban.

—Esto parece vomito, ¡ugh!

Abrió los ojos en demasía al ver a Soon limpiando su lengua de los restos del jamón extranjero que había probado recién, mientras que Jun sólo se carcajeaba apuntándolo.

Joshua optó por indicarles que lo siguieran a la fila para ordenar sus propios complementos lácteos como queso y aquel embutido que a Seokmin tanto le gustaba y que Joshua no entendía por qué si, como había hecho referencia Soon hace un momento, parecía vómito.

—Huevos, listo. Leche, lista. Cereal y mermelada, listos. Pañales... mierda.

Se cubrió la boca de inmediato, volteando a ver a los lados para saber si alguno de sus hijos lo había escuchado.

Por fortuna, todos estaban en sus propios asuntos, por decirlo de algún modo.

Miro una vez más la lista. Aún faltaban los pañales del bebé Dino y eso era de suma urgencia. Solo que, había un problema. Se estaba haciendo tarde.

Se mordió el labio y movió su pie por el ansia repentina.

—Papá Shua, ¿estás nervioso? —preguntó Wonwoo a su lado.

—Oh, no, cariño. Solo estaba revisando la lista de pendientes...

—¡Oh! Faltan las frutas ¡y también las verduras!

Joshua encaró una ceja y sonrió orgulloso hacia el comentario de Woozi.

Su hijo tenía razón, aún faltaba eso y la fila donde encontraba se estaba demorando más de lo que pensaba.

Podría ser que... no, definitivamente no. Aunque ya había dejado ir a Seungcheol y a Jeonghan, aun no quería que sus cuatro hijos restantes estuvieran esparcidos por el supermercado.

Miro una vez más, una mujer estaba haciendo preguntas sobre cada tipo de queso que tenía enfrente, retrasando mucho más el avance de la fila. Su reloj apuntaba bien, Seokmin no demoraría mucho en tener la orden de comida lista.

No había opción.

—Niños —los llamó—, papá dejara que vayan por las cosas que faltan, así que elijan...

—¡Yo quiero las verduras! ¡Traeré muchas zanahorias, papá Shua!

Sí, a Jun le encantaban las zanahorias.

—De acuerdo, pero debes traer todas las verduras, no solo esas. Soon te acompañará y te ayudará a cargar con las fresas y las manzanas.

—Sí, papá Shua —respondieron ambos al unísono.

Ambos partieron juntos hacia allá, saltando un poco en el camino.

—Y ustedes —señalo a Wonwoo y Woozi—, irán por los pañales de Dino.

—Nooo...

Joshua rodo los ojos por la mueca de desaprobación de Woozi.

—O si lo prefieren podemos esperar a que termine de comprar aquí —Joshua señaló a todas las personas delante de él, a lo que los niños negaron efusivamente—. Eso pensé. Los pañales son...

—Los que tienen un bebé gordo en la imagen, lo sabemos.

El hombre frunció el ceño por la respuesta de Wonwoo.

—¿Cómo lo saben?

—Papá Seokmin nos enseño a cambiar a Dino, lo hacemos todo el tiempo.

—¿Enserio?

Los niños asintieron con sus cabezas, seguros. Esa era información que desconocía por completo, es decir, nunca hubo problemas con el cambio de pañales del más pequeño de la familia, por lo que debía admitir que le sorprendía que aquellos dos supieran desempeñar la tarea tan ágilmente.

—De acuerdo... —dijo dudoso— entonces vayan. Y no se atrasen, espero verlos aquí antes de que llegue mi turno. El pasillo está...

—Después del papel de baño, lo sabemos —respondió Woozi esta vez.

Joshua asintió y los niños partieron juntos hacia allá.

Para papá Joshua, el estar solo ahí le hizo pensar que, al menos, de la segunda mitad que le tocaba hoy, todos estaban ayudándolo excelentemente bien. Justo como todos unos niños grandes.

Y la verdad era que ninguno de ellos se sentía ya como un pequeño. 

¿Estaremos llegando a la mitad de la historia? 

-Much & Boo