A Poison I Drink Often (Sterek) (Traducción)

Estoy bien

Stiles abrió la puerta de su edificio, dejando que el aire frío lo golpeara. No sabía a dónde iba, pero no podía quedarse en casa. Todavía era temprano. Demasiado temprano. El sol apenas había salido. Decidió dirigirse hacia un parque local en el centro de la ciudad. Probablemente estaba a veinte minutos a pie desde su apartamento.

"Señor Stilinski." Stiles se giró para ver a la Sra. Worthwell, una señora mayor que vivía en su piso, sonriéndole.

Stiles puso su sonrisa falsa. "Señora Worthwell, ¿qué está haciendo aquí tan temprano?"

"Mi hija se fue de la ciudad esta mañana, salimos a desayunar temprano." Sonrió con tristeza.

"¿Fue una buena visita?" Stiles recordó que su hija vivía en D.C.

"Claro. Siempre es agradable visitar a la familia."

Una oleada de culpa atravesó a Stiles. No visitaba a su padre con suficiente frecuencia, lo sabía, pero el recordatorio todavía le dolía.

"Sabes que mi hijo vendrá la próxima semana, me gustaría que lo conocieras." Dijo la señora Worthwell con entusiasmo.

"Por supuesto." Asintió Stiles. Le había mencionado a su hijo a Stiles varias veces. Aparentemente él recientemente se declaró gay y ella había pensado que Stiles encajaba bien. Él se negó amablemente, alegando que no estaba buscando a nadie, pero ella fue persistente. Lo menos que podía hacer Stiles era conocer al chico.

La señora mayor sonrió. "Que tengas un buen día, querido."

"Ha sido un buen comienzo." Stiles le guiñó un ojo.

Su sonrisa desapareció de su rostro tan pronto como ella pasó junto a él.

Se volvía más fácil fingir. Se había vuelto bueno en eso.

Lástima que no sea real. La voz de Allison resonó en su cabeza.

Stiles respiró hondo mientras luchaba por alejar la voz.

-

El corazón de Derek latió con fuerza cuando vio al hombre más joven caminando hacia él. Tenía las manos hundidas en los bolsillos y los ojos cansados ​​fijos en el suelo frente a él.

Derek había decidido pasar y ver cómo estaba Stiles. Sólo escuchar y asegurarse de que no estuviera en problemas. Era algo que Derek solía hacer en Beacon Hills, especialmente después de un altercado particularmente extenuante.

"Stiles." El nombre salió de sus labios en un tono casi desesperado. Podía oler la tristeza que irradiaba el humano.

La cabeza de Stiles se levantó bruscamente. La mirada que cruzó por su rostro fue brevemente confundida, seguida de una mirada con los ojos muy abiertos.

Stiles parpadeó hacia el hombre frente a él. Se había despertado seguro de que se había imaginado al alfa. Pero aquí estaba otra vez. ¿Por qué vería a Derek? Lo había atribuido al dolor y al alcohol la noche anterior, pero no tenía ningún motivo para ver a Derek. Había dejado de verlo después de deshacerse de Roscoe. El viejo jeep estaba lleno de recuerdos de Derek. Recuerdos que sólo servían para herirlo.

Stiles permaneció en silencio e inmóvil mientras Derek daba un paso adelante.

"¿Estás bien?" Derek sabía que era una pregunta estúpida. Nada sobre Stiles estaba bien.

"Estaba seguro de haber imaginado lo de anoche." Finalmente habló Stiles, en tono tranquilo.

"Bebiste mucho." Asintió Derek.

Stiles se rió de eso, ganándose un ligero ceño fruncido por parte del hombre lobo.

"¿Qué estás haciendo aquí, Derek?" Stiles resopló. Realmente había esperado haberlo imaginado la noche anterior. No necesitaba esto ahora.

"Quería asegurarme de que estabas bien." Respondió Derek con sinceridad.

"Estoy bien." Stiles negó la cabeza.

Derek escuchó la mentira, e incluso si no lo hubiera hecho, la noche anterior había dejado bastante claro que Stiles no estaba nada bien.

"Y no necesito ningún comentario sobre mentirle a un hombre lobo y todo eso. Estoy bien. ¿Estoy completamente bien? No. ¿Estoy mejor de lo que he estado? Sí. ¿Qué estés aquí va a cambiar eso? No para mejor." Stiles pasó junto a Derek, sin querer hablar más.

El estómago de Derek dio un vuelco. Se giró para ver a Stiles alejándose de él.

"Dijiste que me necesitabas, ¿qué cambió?" Preguntó Derek, su tono más duro de lo que pretendía. Como si estuviera desafiando el comentario anterior de Stiles.

"Te fuiste." Respondió Stiles sin darse la vuelta.

La culpa carcomía la columna de Derek. "Lo siento." Su tono se había suavizado ahora.

Stiles se detuvo en seco. Se giró para mirar al hombre lobo, "¿Se supone que eso lo mejorará? ¿Se supone que eso compensará el hecho de que no estabas allí? ¿Qué te escapaste cuando todos los demás me mantenían a distancia?" Stiles escupió, dando un paso hacia Derek.

"No lo sabía." La mandíbula de Derek se apretó. Quería ponerse a la defensiva, pero no podía. Stiles tenía razón.

"¿Cómo lo habrías sabido? Te fuiste." Se burló Stiles.

Derek abrió la boca para disculparse nuevamente, pero Stiles lo interrumpió.

"No sé lo que quieres de mí, pero no lo vas a conseguir. No soy la misma persona que era." La voz de Stiles se quebró ligeramente. Era difícil para él hablarle así a Derek. Solía ​​imaginar cómo sería volver a ver al alfa. Lo imaginó de muchas maneras diferentes, pero ninguna como ésta. Era demasiado cauteloso ahora, demasiado asustado para dejarlo volver a entrar. Habían pasado años desde que pensó en encontrarse con Derek, o que Derek apareciera en su puerta. Siempre habían sido cálidos saludos. Nada como esto.

"Mira, Stiles, nunca pensé que te volvería a ver, nunca tuve la intención de hacerlo. Pero anoche, entraste y percibí tu olor y sentí lo mismo. Como si no hubiera pasado el tiempo. Quería ignorarte, ignorar el impulso que sentí de hablar contigo, pero no pude. Y tú estabas tan molesto y..." Derek se pasó una mano por el cabello. "No sé por qué me encontré contigo, no lo sé, pero no puedo fingir que no lo hice. Estás en una situación difícil, lo puedo ver. Nunca tuve la intención de lastimarte cuando me fui hace tantos años. Sé qué, si me fuera ahora, nunca me lo perdonaría. Tu papá y Scott tal vez no sepan por lo que estás pasando, pero yo sí y no puedes esperar que me vaya."

Stiles apretó los dientes, sintió que su resolución se desvanecía. Tenía que recomponerse.

"¿Te molestarías siquiera si no estuviera tan destrozado?" Exigió Stiles.

"De todos los lugares donde me encontré contigo, fue en un pequeño bar en medio de Seattle, Washington, en el aniversario de la muerte de Allison. No creo en cosas como el destino, pero eso es un poco sospechoso." Señaló Derek.

Stiles negó con la cabeza. "Coincidencia, nada más."

"Stiles, por favor, déjame estar ahí para ti." Suplicó Derek. Sabía que sonaba desesperado, pero no le importaba. Necesitaba que Stiles lo dejara entrar.

"No quiero que estés ahí para mí, Derek. Eres parte de la razón por la que soy un desastre." Con eso Stiles se giró y se alejó.

Derek se quedó boquiabierto tras el humano. No hubo ningún cambio en el corazón de Stiles. No estaba mintiendo.