Su deseo de exclusividad

Capítulo 7

El sol de la mañana brillaba en una habitación sencilla y luminosa, la habitación estaba decorada con un estilo nórdico, discreto y lujoso; era completamente inimaginable que esta fuera la habitación del propietario original, el gran playboy.

Pei Shao se despertó a las seis en punto, y en este momento hacía flexiones en el suelo con la parte superior de su cuerpo desnuda.

Cualquier miembro del departamento militar necesita mantener una buena forma física, porque manejar mechas era también una operación muy exigente físicamente, y muchas veces la victoria o la derrota se deciden en una fracción de segundo. Como mariscal, Pei Shao, naturalmente, se exigía aún más. Aunque ahora ha entrado en el pequeño mundo, aún mantenía el hábito de ejercitar su cuerpo.

Estaba bastante satisfecho con la condición física del propietario original, salvo que este no llevaba una vida muy regular y confiaba en la fuerza bruta la mayor parte del tiempo; dado que tan pronto como se quitó la ropa, encontró algunos moretones en su cuerpo, presumiblemente restos de las peleas de los días anteriores.

Zheng Bei es un visitante habitual de este lugar, el padre y la madre del propietario original no está en casa todo el año; por lo general, solamente están la tía y Pei Shao en casa. La tía sabe que Zheng Bei es amigo de Pei Shao, por lo que le abrió la puerta y lo dejó entrar.

Tan pronto como entró, vio a Pei Shao haciendo flexiones a una velocidad extremadamente rápida, y se frotó los ojos para asegurarse de que realmente se trataba de su hermano Pei, quien raramente madrugaba y hacía ejercicios.

Si no fuera por la clase del Director de esta mañana, no habría madrugado para llamar a Pei Shao.

A su vez, también vio los moretones en la espalda de Pei Shao, pensó en algo, apretó los dientes y dijo: "Esos vagabundos de la tercera escuela secundaria son tan desvergonzados que no se atreven a venir directamente hacia nosotros, sino que aprovecharon cuando estabas solo para atacarte furtivamente, la próxima vez me aseguraré de devolvérselos."

Con la ira contenida, cambió su línea de visión inconscientemente.

"Con un demonio, hermano Pei, te ves... un poco feroz, ah, me siento un poco conmovido..." Zheng Bei se acercó y miró los hermosos y dóciles músculos de Pei Shao y suspiró, mientras encendía el cronómetro para ver que, manejaba una velocidad diabólica.

Para ese momento, Pei Shao terminó su programa de entrenamiento, se echó hacia atrás el cabello empapado, y dijo con disgusto: "No me des asco".

"Además, no te molestes con ellos la próxima vez, lo más importante ahora es estudiar mucho", dijo Pei Shao mientras se secaba el sudor e iba al baño a lavarse.

"Oye~ Hermano Pei no me hagas esto, creo que nadie te creerá, pero hablando de eso, el viejo Wang propuso el llamado Plan de Asistencia Mutua, debemos entregar la lista hoy, ¿a quién piensas escoger?" El viejo Wang es su Director, y su nombre completo es Wang Zhiyong.

Zheng Bei estaba un poco desconcertado por los acontecimientos de anoche, pero por el momento todavía piensa que Pei Shao y Ran Xinglan estaban en una pelea, después de todo, él persiguió a la otra parte durante más de dos años. Entonces, después de pensarlo, se inclina a pensar que Pei Shao podría estar enojado por la actitud de Ran Xinglan y, tal vez, ahora que está sobrio irá a disculparse con él.

Solo digamos que el objeto elegido para darle celos... no era tan bueno como Ran Xinglan.

Asume que Pei Shao aún buscará a Ran Xinglan para este Plan de Asistencia Mutua, además, se trata de un talento universitario con buenas calificaciones, ah.

Pei Shao se cepilló los dientes y no le respondió.

La persona en el espejo tiene la juventud y la ternura de un joven adolescente, su perfil es muy agresivo, sus cejas están llenas de arrogancia, un cabello rojo es aún más extravagante, y su rostro tiene bordes afilados y la suave nuez de Adán lo hace aún más juvenil y enérgico. Sólo los ojos tranquilos revelaban un poco de compostura, y sumado a la apariencia extravagante formaban una extraña armonía, una sensación muy atractiva.