Hoseok
— ¡Hasta mañana, Hoseok— Hari le sonrió a su amigo, y se fué caminando hasta su casa.
— ¡Adiós, nos vemos mañana! — Hoseok tomó su mochila y subió al autobús escolar.
Él era el típico chico que le agradaba a todo el mundo, y ¿Cómo no? Si era un buen estudiante, servicial, guapo.
De todas formas, cada persona en el vecindario lo conocía. Era el hijo del Coronel de policía, un hombre muy respetado y a la vez bastante serio.
La perfección era la regla dorada del hombre, y su hijo debía ser el claro ejemplo de ello.
Hoseok jamás sintió cariño de su padre, un abrazo, unas palabras de aliento. Pero ese era el estilo de vida que habían decidido tener, ya se había acostumbrado a ello.Yoongi
Estúpidos ricos.
Yoongi había aprendido a odiar a las personas de clase alta desde muy niño. Toda la vida lo habían hecho menos a él y a su madre por no ser personas de la alta sociedad.
De todas formas ¿Qué sentido tenía? ¿Sentarse a beber con viejos de 70 años a hablar de sus yates y la evasión de impuestos? Neh, que fastidio.Pero lo que más odiaba, es el hecho que por culpa de esos estúpidos Aristócratas su madre estaba así.
Él la observaba dormida en esa camilla de hospital, luchando con su vida.
Esos estúpidos Park, no la ayudaron en su momento de crisis, y no se hacen responsables de todo lo que hicieron.
Ella estuvo años trabajando para los Park, pero claro, ellos no agradecerían eso.
Hoseok
Hoseok tocó la puerta del estudio de su padre. Cuando escuchó la aprobación del mayor para pasar, entró en la habitación.
Su padre estaba mirando la ventana, dándole la espalda a Hoseok. Había una botella de vino tinto en la mesa y uno que otro papel.
— ¿Cómo te fué en la escuela, hijo? —preguntó el Coronel Jung, con su voz gruesa y áspera, rompiendo el silencio.
— Fue un excelente día, padre. Los resultados de mis exámenes fueron satisfactorios, recibí un premio al mejor jinete y fuí nombrado estudiante del mes nuevamente.
— Perfecto. Puedes retirarte, ve a cenar con tu madre, y en exactamente dos horas quiero verte en la zona ¿Entendido?
— Como tú digas, padre. Me retiro, con permiso — Hizo una pequeña reverencia en señal de respeto, y salió del estudio.
Yoongi
El doctor le dió la noticia más áspera que pudo sentir.
Su madre tenía salvación, sí. Pero si tratamiento era increíble y exageradamente caro.
¿De dónde sacaría el dinero que necesitaba? ¿Que debería de hacer? Tenía 4 trabajos de medio tiempo, pero ni siquiera juntando todo su salario lograría pagar lo que costaba.El chico pensaba mientras caminaba por los oscuros callejones de Seúl, camino hacia su casa.
Pero, como la vida lo quería demasiado, unos tipos salieron de la nada a intentar robarle lo poco que traía en ese momento.Yoongi había lidiado con cobradores toda su vida, o con personas que en su momento intentaron robarle a la familia Park. Esto no era nada.
Aunque recibió varios golpes, logró devolver los mismos con mucha más fuerzas. Era él contra 5, y aún así les estaba dando pelea dura.
Siguieron contraatacando hasta que un disparo fue directo a la cabeza de uno de ellos.
Los demás salieron corriendo debido al miedo, sin saber de dónde salió aquel disparo.
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La princesa de la mafia| Imagina con BTS
FanfictionX: No podemos matarla.. Xx: Pero tampoco hay que dejarla ir X: Niña, tú decides