No seas así.
Al día siguiente, Cate se levantó temprano, alrededor de las 8 de la mañana. Emily aún seguía durmiendo. Cate se dirigió al baño, tomó una ducha, se vistió y luego decidió bajar al comedor del hotel para desayunar.
Mientras Cate disfrutaba de su desayuno en el comedor, Emily finalmente se despertó. Al darse cuenta de que Cate no estaba en la habitación, se encaminó al baño y notó el vapor en los espejos, evidencia de que alguien había estado allí recientemente. Emily se arregló y se vistió antes de salir en busca de Cate.
La encontró en una mesa del comedor, a cierta distancia, leyendo una revista mientras saboreaba su café. Un latido más rápido de su corazón la sobresaltó al ver a Cate. Emily no sabía por qué, pero una extraña emoción la invadió. Lo que estaba claro era que tendría a Cate para ella sola durante toda una semana.
Cate la vio parada a lo lejos, le sonrió y le hizo un gesto con la mano para que se uniera a ella. Emily sonrió en respuesta y se acercó a la mesa. Realizó su pedido de desayuno y ambas comenzaron a disfrutar de su primera comida del día juntas.
Cate: (sonriendo) Emi, ¿cómo dormiste?
Emily: (feliz) Muy bien, gracias. Pero, ¿por qué no me despertaste?
Cate: (riendo) Lo siento, tenía mucha hambre y no quería molestarte, te veías muy linda durmiendo. (pausa) Además, tenía demasiada hambre.
Emily: (riendo) ¿y yo? Yo también tenía hambre...
Cate: (bromeando) ¿Que te pasa? Te ves demasiado feliz.
Emily: No lo sé (riendo)
Cate: Anoche, a las 3 de la madrugada, estabas extremadamente preocupada por lo que pasaría hoy. ¡Y ahora eres la mujer más feliz del mundo! ¿Quién te entiende?
Emily: (sonriendo) Estar contigo me hace muy feliz. Hay partes de mí que solo existen contigo.
Cate la miró durante unos segundos con una sonrisa:
Cate: (cariñosa) Ay Emi...
Ambas mujeres continuaron disfrutando de su desayuno, compartiendo risas y una mirada llena de amor, sintiéndose cada vez más cerca la una de la otra.
Cate y Emily volvieron a la habitación del hotel. Emily le informó a Cate que se dirigiría al baño para tomar una ducha. Cate asintió y decidió ir al balcón para disfrutar del paisaje mientras esperaba.
Mientras Emily se duchaba, alguien llamó a la puerta. Cate supo de inmediato quiénes eran, ya que era hora de prepararla para el show. Eran dos mujeres, Tamy y Maddison, quienes Cate conocía, aunque no eran muy cercanas.
Luego de unos minutos y después de organizar sus cosas, las dos mujeres comenzaron a preparar a Cate para el espectáculo. Sin embargo, en un momento incómodo, Emily salió del baño con una toalla alrededor de su cuerpo, sin saber que las mujeres estaban presentes en la habitación.
Emily: (avergonzada) Lo siento, no sabía que había gente aquí.
Emily muy avergonzada y nerviosa volvió al baño.
Las mujeres y Cate quedaron sorprendidas, sin saber cómo reaccionar. Las mujeres intercambiaron miradas sorprendidas y comenzaron a hacer preguntas.
Tamy: (sorprendida) ¿Qué está pasando aquí?
Maddison: (curiosa) ¿Andrew sabe de todo esto?
Cate les pidió un minuto y se retiró al baño, donde Emily se encontraba avergonzada. Cate le aseguró a Emily que lo resolvería y le entregó la ropa que había preparado.
Cate: (dándole un beso en la mejilla) Tranquila, lo solucionaré.
Cate regresó a la habitación, donde las dos mujeres seguían esperando. Les explicó que esta situación ya venía ocurriendo desde hace un tiempo y que Andrew no sabía nada de ello. Les rogó que guardaran silencio al respecto. Tamy y Maddison entendieron y se comprometieron a mantenerlo en secreto.
Cate también les informó que la mujer en el baño se llamaba Emily y que, cuando ella saliera, deberían actuar con normalidad y saludarla. Las mujeres asintieron y continuaron con su trabajo de vestirla y maquillarla, mientras esperaban la salida de Emily de su escondite.
Emily finalmente salió del baño. Se encontró allí en la habitación con las tres. Las dos mujeres miraron a Emily, y la saludaron con normalidad.
Tamy: ¡Hola, Emily!
Maddison: Buenos días.
Emily, sintiéndose incómoda, devolvió el saludo.
Emily: Hola.
Emily le dijo a Cate que iría a caminar y que si necesitaba algo, la llamaría. Cate entendió, pero antes de que Emily se fuera, le dijo:
Cate: En mi mochila está mi cartera, por si quieres tomar algo de dinero.
Las mujeres miraron a Emily, notando su expresión seria.
Tamy: (susurrando a Maddison) Parece que Emily no está contenta.
Maddison: (asintiendo) Sí, parece que Cate ha tocado un punto sensible.
Emily, de manera un tanto cortante, respondió:
Emily: No necesito tu dinero, no soy tu hija.
Emily agarró su abrigo y se fue, dejando atrás una atmósfera incómoda en la habitación.
Cate se sintió incómoda por la reacción de Emily, pero las dos mujeres continuaron con su trabajo. Completaron el proceso de vestir y maquillar a Cate para su show, aunque la atmósfera en la habitación estaba tensa.
Maddison: Parece que Emily no está muy contenta con lo que le dijiste.
Tamy: (asintiendo) Parece que sí.
A pesar de la incomodidad, terminaron el arreglo de Cate y se prepararon para el show. Cate salió de la habitación, consciente de que tendría que abordar el tema con Emily más tarde. Por el momento, debía enfocarse en su trabajo y el espectáculo que tenía programado.
Luego de 2 horas, Emily volvió a la habitación. Cate estaba en el balcón, ya cambiada y maquillada. Se acercó a Emily y notó que había comprado algunas cosas.
Cate: (tratando de hablar) Vi que compraste algunas cosas, ¿cómo te fue?
Emily: (con sarcasmo) Bien, porque puedo comprar cosas con MI dinero
Cate: (comprensiva) Emi... Perdóname por lo de hoy, no quería que te sintieras incómoda.
Emily: (expresando su molestia) No puedes actuar como mi "novia" y luego como mi "madre" frente a esas dos mujeres.
Cate: (reconociendo su error) Tienes razón, lamento mucho lo que dije.
Emily comenzó a guardar las cosas que había comprado, dándole la espalda a Cate sin decir una palabra. Cate se acercó a ella, tratando de que la mirara.
Cate: (insistente) Por favor, mira.
Emily resistió al principio, pero finalmente cedió. Cate se disculpó una vez más.
Cate: (sinceramente) Fue una tontería lo que dije, y lamento que nuestra conversación previa haya arruinado el momento. No debemos pelear, especialmente durante estos días antes de que llegue Andrew. Deberíamos disfrutar este tiempo juntas.
Emily asintió en acuerdo y, cambiando de tema, le dijo a Cate que lucía muy hermosa.
Emily: (cambiando de tema) Luces muy hermosa.
Cate sonrió y respondió besándola.
ESTÁS LEYENDO
two glances do not meet by chance
RomanceEn las calles bulliciosas de Nueva York, donde las luces destellaban y el arte se fundía con la esencia de la ciudad, comenzó a tejerse una historia que cambiaría el curso de dos vidas de manera inesperada. Una joven de diecinueve años, cuyo corazón...