Ya habían pasado algunas horas y yo estaba en la sala platicando con la mamá de Roier.
- Ya es un poco tarde, creo que es mejor irme a- dije levantándome del sillón.
- ¿A donde irás?- pregunto Roier parándose junto conmigo.
- A casa de Ari- dije sacando mi teléfono- pediré un Uber.
- Es muy peligroso irte en Uber de noche hija- dijo la mamá de Roier- es mejor que nosotros te llevemos o mejor quédate a dormir.
- No, no es buena idea dormir aquí, no quiero ser una molestia, gracias- respondí con pena.
- Cual molestia, tú me has ofrecido tu casa algunas veces y no me molesta que te quedes conmigo- dijo Roier insistiendo.
- Esta bien, pero me iré temprano- respondí aceptando.
- Claro vamos a mi habitación- dijo Roier guiándome por la casa.
Pasamos por un pasillo asta llegar a las últimas habitaciones, el abrió una de esas habitaciones y me hizo una seña para pasar.
Prendió la luz de aquella habitación y rápidamente la reconocí, aquellas paredes azules con muñequitos de Mario.
- Ven buscaré algo cómodo para que te cambies- Dijo Roier abriendo su closet.
- Muchas gracias Roi...- murmure con una pequeña sonrisa.
- No hay de que Bella- dijo con una pequeña carcajada.
- No me digas así- dije frunciendo el ceño.
- ¿Entonces como te digo?- dijo mirándome con los brazos cruzados.
- No se, emm, Ali, Alice, licia, pero no Bella, porque le diste un mal significado- respondí dándole una mala cara.
- No te pondré más apodos así pues, serás simplemente Alicia Garza Alonso- respondió dándome la espalda.
- No, no tan formal- respondí con un puchero.
- era broma jaja- dijo volviéndome a ver- Toma esta pantalonera y esta blusa para que estes cómoda.
- Muchas gracias- dije aceptando la ropa.
Salí de la habitación de Roier y camine unos cuentos metros asta llegar al baño, abrí la puerta para después pasar y cerrar la puerta.
Me mire en el espejo y me veía mal, un poco de mi delineador corrido y mis ojeras eran mucho más notorias.
Abrí la llave del grifo y mojé mi cara para limpiar aquel maquillaje corrido, seque mi cara y me cambie rápido.
- Ya me cambie- dije saliendo del baño-¿ porque no me dijiste que me veía terrible?- pregunte cruzándome de brazos.
- Claro que no te veías mal- Respondió Roier.
- Quisiera creerte- respondí- Vallamos a dormir.
- Si vamos porque tienes muchas ojeras- respondió Roier llevándome a su cuarto- dormirás en mi cama, dormiré en el sillón.
- Okey buenas noches Roi- dije dándole un beso en la mejilla.
- Descansa Ali- me respondió con un abrazo.
Cerré la puerta de la habitación y me acosté en la cama mientras veía un poco el celular, aún tenía que publicar algunos videos atrasados a YouTube y Clips que ya me habían editado a TikTok, también aproveché para mandar un correo a la directora de la universidad para pedir el cambio de aquel profesor.
Dieron las 3 am y por fin quede dormida.
Escuche la estupida alarma de mi teléfono sonar, así que rápidamente la apague para después ir al baño a lavarme la cara, baje las escaleras y ahí estaba Roier dormido en un sillón, seguí caminando y me topé con la madre de Roier.