Ya había pasado una semana así que tenía que ir a tomarme las fotos, me levante de mi cama y me dirigí al baño.
Mientras me bañaba mi teléfono empezó a estallar de mensajes, no le di importancia y seguí bañándome.
"Amor me dejaron encargados
A los niños otra vez"
"Te quieren ver"
"AHHHH ALICIA MAGGIE
SE VOLVIÓ A CORTAR EL CABELLO"
"Que hago?"
"yo no se arreglar cabello"
"Alv voy a tu depa mejor"
"No es pregunta, es aviso"
"Espero no tengas planes"
"Se me olvidó que hoy ibas
Tomarte las fotos"
"No importa te podemos acompañar"
"Ya voy llegando"
Termine de bañarme y cambiarme y vi todos los mensajes, apague el teléfono y me acomode para maquillarme.
Escuche como se abría la puerta y unos gritos abundaban el departamento. Como ya sabía que eran los niños camine asta la puerta de mi habitación y ahí vi corriendo a los dos péquelos hacia mi dirección, seguidos por mi novio.
- No me contestaste los mensajes- murmuro mi novio mostrándome su teléfono.
- Apenas los leí, así que supuse que no tardarías en llegar- expliqué.
- Esta bien- murmuro entrando a mi habitación- Que cansancio es cuidar a estos demonios- se quejo acostándose en mi cama.
- Lo qué pasa es que no sabes cuidarlos- le respondí cargando a Maggie.
- Tia, mi cabello esta cortado- dijo limpiando sus lágrimas- ¿me lo emparejas?
- Claro cariño, siéntate aquí- apunte la silla donde me maquillaba.
Tome las escaleras y corte su cabello un poco más abajo de sus hombros.
- Su mamá nos va a matar- dijo mi novio al notar que tan corto quedó su cabello.
- A ti, por dejarlos jugar con tijeras- lo regañe- Ya quedó Maggie, deja termino de alistarme o se me hará tarde.
Me volví a sentar mientras mi novio barría el cabello que estaba en el suelo, termine de arreglarme y me puse la ropa que Carlos había traído para mi, era una falda blanca con un top y suéter negros.
- Ya llegó Carlos- avisó mi novio desde la sala.
Salí de mi habitación y camine asta la sala, Carlos me miro con una sonrisa ladina y mi novio lo miro mal.
- Qué bueno que no te vestiste de vagabunda otra vez- murmuro Carlos- vámonos se nos hace tarde.
- Ellos irán conmigo- avisé cargando a Maggie y tomando de la mano a Samuel.
- Entonces apúrense, no quiero que los nenes hagan desorden- advirtió Carlos.
- Ellos se portarán bien- asegure.
Todos caminamos asta el auto, abrí la puerta trasera para que se suban los niños, mi novio abrió la puerta de enfrente y estaba apunto de subir.
- Alicia va enfrente- dijo el argentino poniéndose sus lentes.
- Ni en pedo se va a subir enfrente así vestida- respondió mi novio celoso.
- Esta bien Carlos, yo me voy atrás con los niños- murmure abrochando los cinturones de los niños.
