Esta es la segunda parte de la adaptación de «El nuevo secretario».
Te aconsejo que antes de leer esta parte, te leas la primera, la cual encontrarás en mi perfil con el número 3.
First seme
Khao uke
First se despertó tras escuchar la alarma de su móvil la cual marcaban las seis pues al parecer finalmente se había quedado dormido, después de todo lo que había sucedido con su esposo.
Este se levantó y vio que éste aún dormía, entonces lo movió suavemente para despertarlo, aunque con precaución pues no sabía de que humor estaría.
...-Amor... cariño... Abre tus ojitos, tenemos que irnos
Khaotung se removió en la cama, se estiró emitiendo un leve gruñido y abriendo los ojos miró a su marido.
-¿Qué pasa?
-Tenemos que irnos a casa
De repente el ayudante se vio la mano vendada y asustado de un salto salió de la cama.
-¿Q-Qué me ha pasado?, ¿Po-Por qué tengo e-esto?
-Tranquilo, te lo hiciste con el espejo del baño
-¿Q-Qué espejo?, ¿Cu-Cuándo fue eso?, no me acuerdo
-¿No te acuerdas?... después de que hicimos el amor, tú fuistes al baño, te encerraste y luego gritaste
-No... no..., nosotros fuimos a cenar, luego paseamos e hicimos el amor en la playa y luego vinimos aquí y nos dormimos.
-No, cariño... Eso que dices sucedió hace días
Khaotung se agarró la cabeza con las manos y apretó fuerte.
-¿Qué es lo que me pasa?, ¿Por qué no me acuerdo?
-Cielo... tranquilo, solo estás cansado. Hoy es jueves. Llevamos casi dos semanas aquí y nos vamos ya.
El más baño lo miró con el ceño fruncido.
-No puede ser...apenas hemos llegado, ¿Cómo va ha ser tiempo de irse?
El empresario le enseñó en el móvil el calendario y le señaló el día, entonces este se quedó asombrado pues no entendía nada, ni tampoco se acordaba de lo que su marido le decía.
Finalmente se vistieron pues el baño estaba lleno de cristales y no podían ducharse, luego cogieron sus maletas y tras pagar, se fueron al aeropuerto.
Khaotung pasó el vuelo durmiendo mientras su esposo lo observaba muy triste pues le asustaba mucho pensar en lo que este podía estar padeciendo.
Aterrizaron horas después y ya Sam los esperaba en la puerta de desembarque.
...-Señores Khanapan, bienvenidos, ¿Nos vamos a casa?
El empresario miró de nuevo a su marido y negó.
-No...nos vamos al hospital.
-Si, señor
-¿Al hospital para que?- preguntó entonces el más bajo bastante confuso.
-Cielo... te hice una cura rápida en esa mano pero quiero que te la hagan bien-mintió.
El mayordomo puso rumbo hacia allí pues Khaotung se quedó conforme pero lo que éste no sabía era que en ese hospital estaba Louis con sus antiguos colegas, esperando para hacerle un chequeo.
Llegaron y entraron, entonces se llevaron al más bajo entre protestas de este, mientras que First se quedó esperando en la sala muy nervioso.
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