ALFONSO
Anahí estaba rara. Pasaba algo, lo notaba. Pero ella insistía en que solo eran los nervios por el primer viaje con el equipo. Pero sabía eso desde el principio y no estaba nerviosa, más bien ansiosa por ir y salir de Detroit.
— ¿Estás con Annie? —gritó Chris desde el salón, haciéndome reír.
Desde que lo sabía había pasado por varias fases. Enfado había sido lo primero, pero ahora parecía que tenía vergüenza por si nos encontraba follando sin control y se anunciaba a gritos para, según él, «no ver cosas desagradables». Como si Anahí y yo hubiésemos tenido oportunidad de no pillarlo con Bianca en plena faena...
— Estoy solo —grité en respuesta.
— Ah... —Chris entró, buscando a su hermana con la mirada, como si no me creyese— ¿Y dónde está? Se supone que iba a estar contigo.
— No sé. Es independiente eh, no está colgada de mi todo el día.
— Ah, ¿si? Fíjate que no me había dado cuenta. Como se la pasa besándote y abrazándote...
— ¿Hablamos de Bianca? —sonreí de lado.
— ¿Habéis hecho ya la maleta?
— Iba a bajar a comprar un par de cosas, ¿necesitas algo?
Negó con la cabeza así que agarré mi cartera, me despedí de él y salí de casa.
— Si en lo que estoy fuera regresa tu hermana, pregúntale si necesita algo y lo compro.
— Hecho —gritó, otra vez desde el salón.
ANAHÍ
Dylan era insoportable. Llevaba días hostigándome con el mismo tema, y yo llevaba prácticamente el mismo tiempo sin dormir intentando encontrar una solución sin dejar a Alfonso y consiguiendo que ese vídeo desapareciese. Por lo menos ahora íbamos a tener unos días lejos de todo con el viaje. Por lo menos...
— Buenas tardes señorita Puente —me sonrió, sacándome de mis pensamientos.
— Cuantas veces te he dicho que me llames Annie, Ted —sonreí de vuelta.
— Si, lo siento —rió—. Hay alguien esperándote.
— ¿Alguien?¿Quién...? —lo seguí hasta que me encontré frente a frente con mi pesadilla personificada— Tú...
— Hola, cariño —sonrió Dylan, con los brazos abiertos hacia mi.
— ¿Qué haces aquí?
— Vine a verte —sonrió de nuevo, inocente—. Ted, por favor ¿Nos podrías dejar solos? Gracias.
Ted me miró, esperando una respuesta. Contuve el aliento unos segundos, hasta que terminé asintiendo mientras suspiraba. Era mejor terminar con esto cuanto antes.
— ¿Y bien?
— ¿Ya has hablado con ese?
— Ese tiene un nombre.
— ¿Has hablado con él? —volvió a preguntar, claramente enfadado.
— No. Ni voy a hacerlo.
— Ah, ¿no? —miró por encima de mi y sonrió como si hubiese visto algo que le interesaba, estaba a punto de girarme cuando me agarró la cara y susurró— Te lo voy a poner fácil.
Los labios de Dylan se posaron sobre los míos unos segundos antes de escuchar la fuerte voz de Alfonso detrás de nosotros.
— ¡Qué cojones pasa aquí!

ESTÁS LEYENDO
Irresistible
ФанфикAnahí decide huir de su pasado cuando abre los ojos con su tóxica relación y llega rápidamente hasta la casa de su hermano, Christian, para revolucionar no solo a este, sino también a su nuevo compañero de piso, Alfonso Herrera. Las cosas se empiez...