Estoy Aquí •~Hiro Hamada x tn~•

14

-¡¡playa playa!!- grito emocionada Rose.

Entonces Cass salió de la cocina llena de harina.

-tienen razón, los niños son más tranquilos que las niñas- dijo viendo a los tres jóvenes que rieron al verla.

-oye, si no te portas bien, no iremos a ningún lado- dice cómo reproche Dan.

-mira quien habla.

-¡oye! Yo me he portado bien.

-aquí- dijo la niña rodando los ojos.

___ soltó una risita, captando la atención de los niños.

-perdón, es que nunca creí verlos convivir juntos. Hasta parecen hermanos.

-claro que no- dijeron al mismo tiempo y ___ estalló de la risa.

Al calmarse vio a Cass y dijo:.

-pero ¿y la cafetería?.

-un día cerrado no es nada cariño.

-pero ¿y la escuela?.

-hace rato llame, dije que tenía que llevarte a un chequeo con el médico.

-pero ....... ¿Y su universidad?- dijo viendo a Hiro como excusa.

-de hecho, es por la universidad que quiero ir, he estado muy estresado últimamente, necesito un respiro.

____ volteo a verlo con cara de reproche, para luego dar un suspiro.

-esta bien.

-yeiii ¡¡¡viaje de familia!!!- grita emocionada - a ver- dijo sacando una libreta y apunto- necesitamos sandwiches, toallas, bloqueador solar ......- dijo yendose al segundo piso.

-¡¡¡____!!! ¡¡¡____!!! ¡¡¡Juguemos!!!- dijo emocionada la pequeña.

-mmm lo siento Rose- dijo cargando la en brazos - tengo que atender las mesas- dijo y se la paso a Dan.- me la cuidas.

____ se puso un mantel y salió a atender las mesas.

Dan le pasó a Rose a Hiro y dijo:.

-me la cuidas, gracias- dijo, tomo un mantel y salió rápidamente de ahí.

-espe.....- y lo dejaron hablando solo.

-¿puedo atender las mesas también?- pregunto con ternura la niña.

-jeje aún estás muy pequeña para eso.- dijo un tanto nervioso.

La niña de cabellos dorados hizo un ligero puchero.

-jeje eso no funciona conmigo- dijo sonriendo.

Entonces el gran robot se acercó detrás de Hiro asustado a la pequeña. Quién se aferró a los brazos del chico. Este un tanto confundido solo la sostenía sin abrazarla. Pero un ligero recuerdo llegó a su cabeza.

Un pequeño niño se encontraba jugando con sus autos de juguete, pero un fuerte ruido de algo caer, lo alarmó y rápidamente se metió bajo la cama asustado.

Pasos lentos se comenzarón a escuchar, y la puerta se fue abriendo ligeramente, haciendo las bisagras rechinar.

El niño cerro los ojitos con fuerza, esperando no ser encontrado por lo que sea que este afuera.

Unos pies entraron, recoriendo todo el cuarto. El pequeño niño solo podía abrazar uno de sus autos de juguete, completamente aterrado.

-¿Hiro?- pregunto una dulce voz.

El niño abrió los ojos lentamente y pudo ver los pies que entraron al cuarto.