Parki ya no tiene nada. Él es solo cenizas y un espectro que no vale, no obstante, sigue manteniendo su supervivencia como una mísera marioneta. Y si es necesario, volverá a desenterrar al Ángel de la Muerte para recuperar lo que perdió. Sin embargo...
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—Quiero ir contigo, Jimin.
—No seas cabezón, Jeon —suspiró el rubio por enésima vez y mientras observaba como Taehyung junto a Hobi trabajaban en las máquinas anotando datos de relevancia.
¡Por qué sí, irían por Namjoon!
El sistema Alse rápidamente se hizo eco de las noticias de que supuestamente se había arrestado a un sospechoso en otro intento de atentado. La delicada situación se había regado como agua, y si la prensa no miente eso fue al mediodía, así que Jimin calcula que Namjoon es ese sospechoso porque si fuera alguien de la CIA, ya esta se hubiese movilizado para distorsionar la aprensión, más que el mismísimo jefe de policía de Seúl salió en persona para dar un parte.
—Mira Jeon, no hay tiempo para discutir y no lo hago para desquitarme de que me hayas dejado encerrado, no soy tan inmaduro. Te necesito en el aeropuerto, —dijo observando la hora—. Estamos retrasados para todo, Misuk llega en media hora y a Namjoon deben estar por trasladarlo o algo peor en relación a la CIA, ¿puedes cooperar? —cuestionó exasperado por la terquedad de su extraño.
Este lo miró directo a los ojos, donde sus pupilos redondos se oscurecieron si eso era posible, pero no por enojo, sino por miedo. Igual, no la puede seguir embarrando y tentar a la paciencia de Jimin.
—Jimin ya tenemos todo, segun el último parte van a trasladar al sospechoso a la central de la Defensa Nacional Coreana —informó Taehyung a lo lejos.
Jeon cediendo, suspiró y buscó en sus bolsillos, sacando a la luz las llaves de un coche. Dudoso aún, sin embargo, no le quedaba de otra.
—¿Cómo está tu hermano para qué haga una copia de Alse? —preguntó entregándole el objeto con recelo— Son del carro que Choi nos dió, no he tenido tiempo de sacar el armamento así que todo está en el maletero de la camioneta.
Park asintió y de reojo visualizó al sol del internet, todavía seguía inquieto, pero no se veía perdido como antes. De todas maneras tendrá que suministrarle otra dosis de metadona.
—Creo que Hobi no está tan mal, puede ayudar.
—Bien, iré por un tablet. No quiero que te expongas a que la CIA o Owen te electrocuten, si hace un buen trabajo, mientras haya acceso a internet, el sistema los seguirá bloqueando y también agilizará cualquier hackeo que tengan que hacer en los servidores de la policía.
—Gracias Jeon, vamos —el rubio le regaló una sonrisa a medias al heredero y dio media vuelta para ir hacia los demás.
Jeon se quedó unos minutos contemplándolo con un nudo en el pecho por la incertidumbre y el mal presentimiento. Además, Jimin desprendía una tensión filosa y le duele que hayan retrocedido. Es que ni una caricia le regaló.
—Si algo he aprendido, Kook, es que el amor y la presión, no van de la mano —la voz grave de Suga lo sorprendió por la espalda, con un ligero brinco ladeó para mirarlo de frente— Y menos con alguien como Park.
