★//Dulce Amor//★ (+18) TERMINADA

Capitulo 6

Dennis

- Te prepararé algo de comer, ¿Qué te gustaría? – Natalie me mira desde el marco de la puerta, ahora estamos en su casa donde afortunadamente vive sola, es pequeña y muy acogedora, casi haciéndome sentir como en un verdadero hogar.

- Me gustaría un caldo con muchas verduras por favor – Asiente con una sonrisa triste en su rostro, me da una última mirada antes de darse la vuelta y desaparecer por la puerta.

Nunca entenderé porque mis padres me odian tanto, sentir su mirada de odio me hace sentir la cosa más insignificante del mundo, desde que tengo uso de razón me han golpeado, abusado y vendido por droga.

Cuando hacen eso, solo cierro los ojos y espero que todo termine pronto, no puedo recordar todas las veces que han abusado de mí por unos simples gramos de droga.

Todos los días imagino como se sentirá estar con una verdadera familia, amo a mis padres, pero no puedo evitar pensar cómo serán de otra manera, que no sean unos drogadictos y alcohólicos.

También no entiendo porque todos los que están a mi alrededor me odian tanto como para golpearme, decir que estoy mejor muerto, sería lo mejor, pero escucharlo duele mucho.

Solo tal vez odien mi personalidad negativa.

***

- No me parece bien que ya te quieras ir, todavía no terminas de recuperarte – Natalie sigue diciéndome que puedo quedarme con ella todo el tiempo que quiera, pero tengo escuela y además ya la he molestado mucho.

- Estaré bien, muchas gracias por cuidar de mí y preocuparte – Le doy una sincera sonrisa, una que casi nadie ha visto.

- Aunque no estoy de acuerdo debo respetar tu decisión – Me estremezco cuando me envuelve en un delicado abrazo, haciendo que quiera echarme a llorar, después de un minuto se aleja y agarra mi mano donde pone dinero, de inmediato niego con la cabeza intentando regresarlo.

- Natalie no puedo... -

- Lo hago con mucho gusto, recuerda que cuando necesites algo siempre estaré para ti, cuídate mucho - Me da un beso en la mejilla.

Le doy una mirada de agradecimiento y salgo de su casa, el aire frio me hace estremecer por completo, es de noche así que obviamente hará frio.

Aguantando mejor que puedo el dolor camino a la casa, mi brazo aún está siendo sostenido por el cabestrillo, mi cuerpo está cubierto de muchas vendas que oprimen los lugares lastimados intentando minimizar el dolor, cuando estoy enfrente de la casa abro la puerta, mi madre de inmediato se levanta del sillón para verme furiosa.

- ¡¿Qué haces aquí?! – Antes de que mi madre levante su brazo para golpearme saco el dinero que me dio Natalie, ella lo arrebata de mis manos, lo cuenta para luego darse la vuelta e irse a la cocina

Suspirando camino hasta mi sótano, en cuanto estoy ahí me dejo caer en la colchoneta, agarro mi cobija y me envuelvo lo mejor que puedo con mi brazo libre.

Una vez cómodo cierro los ojos, dejándome llevar por el sueño y cansancio.

***

Sollozando de dolor termino de ponerme mi sudadera, ahora que no tengo ayuda de Natalie para cambiarme el ponerme la ropa es agonizante, lo último en ponerme es uno de mis gorros y los lentes negros, con mi brazo sano acomodo el otro en el cabestrillo.

Saco un cubrebocas para cubrir los horribles golpes que tengo en mi rostro, tomo una vieja bufanda y cubro mi cuello donde tengo una marca de una mano, producto de mi padre, me alegro de haberme desmayado, así no sentí todos los golpes que me dieron.

Agarro otro cuaderno junto con unas plumas y las pongo en una bolsa transparente de plástico, cuando siento que ya tengo todo salgo del sótano a la puerta principal, cerrándola detrás de mi camino a la escuela.

Para mi gran fortuna soy una persona zurda y no ocupo mi mano derecha que tiene el cabestrillo.

Entro a la escuela y por primera vez nadie me mira, todos están en su platicas, veo a todos lados, pero ninguno de los que me golpean se encuentran, algo sumamente raro ya que nunca han faltado a una clase.

Sigo caminando hasta la clase, cuando abro la puerta espero ver al grupo que siempre abusa de mí, pero tampoco están, ni siquiera los nuevos 6 estudiantes, creo que mi día va mejorando, aunque sea un poco. 

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