Cap. 20.

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Tom:

Después de hablar con El Rubio, me había quedado hecho mierda...
Ya tenía mayoría de edad, y me procesarian como a un adulto.
Estaba acostumbrado a estar un par de noches en un calavoso, y luego me dejaban en libertad por ser menor de edad, pero ahora el cuento era otro.

Estaba sentado en el pedazo de cemento frío que hay dentro para dormir... Tenía mi rostro metido entre mis rodillas y apretaba mis piernas de la desesperación...

Volver a Stuttgart... Irme... Sin Bill... Dejar a Bill en Hamburgo y salir de aquí.
Quedarme aquí, dentro de la maldita cárcel, preso otra vez como de costumbre... Vender la droga de Aron, y trabajar desde aquí sin irme de Hamburgo... Podría ver a Bill de ves en cuándo.

Ambas opciones valían mierda... Pero no quería abandonar al muñeco... Me había entregado la responsabilidad de sus sentimientos en mis manos, si me largaba lo haría pedazos.
Aron me había ofrecido irnos y llevarnos a Bill... Pero jamás aceptaría eso... Ni cagando permitiría qué Bill viviera en esa mierda de lugar.

De pronto un oficial apareció y levanté la mirada atento.

- Tienes una visita... Parate de ahí!!

- Otra visita??... No quiero ver a nadie... Dile que se vaya!!

- Es tú madre!!... Parate de ahí dije!!

... Vi como poco a poco la silueta de Simone apareció frente a mi, y me quedé perplejo.

- Necesito hablar contigo.

Dijo con prepotencia.

- Tienen quince minutos... Ni un solo minuto más... Los dejaré solos.

Dijo el oficial mientras se retiraba del lugar.
Me puse de pie y caminé torpemente hasta la reja de la celda.

- Qué haces aquí?

- Hay algo que tenemos que hablar...
Bill... Es el único tema en común para ambos.

- Qué mierda quieres Simone?... Ya estarás satisfecha no??... Estoy tras las rejas!!... Eso era lo que querías... Ahora por qué mierda quieres joder?

- Te atreviste a tocar a Bill... A mi hijo... A mi pequeño... Lo tocaste y... Eres un degenerado!!... Sé que lo manipulaste... No sé cómo lo hiciste, pero estoy segura que es tú culpa!!... Maldito asqueroso!!... Me das asco!!

... La observé detenidamente, y sonreí.

- Vaya!... El día que te visite en tu casa... Cuando vele tus sueños... Lo recuerdas?... Esa noche... Te veías muy diferente... Estabas cagada de miedo... Ahora te sientes con poder... No es así!?... Pues déjame decirte que muevo dos dedos, y salgo de aquí de inmediato... Y cuando lo haga, me encargaré de cerrarte el maldito hocico.

- No me digas!?... Pues creo que no será tan fácil para ti... Jessica levantó cargos de intento de abuso sexual en tú contra... Y yo... También lo hice... Le dije a la policía que abusaste de Bill... Y además les entregue las imágenes de la cámara de vigilancia de mi casa... Ahí aparece como entras como un delincuente por la noche... A todo eso, sumale el asesinato de tú propio Padre Tom.

... Apreté los fierros de la celda con fuerza y mi mandíbula comenzó a temblar, me quedé mirándola directamente a los ojos y de un impulso lleno de rabia golpeé la reja con ambas manos haciéndola temblar y sonar de manera impactante, Simone salto del susto, y retrocedió de inmediato.

- Estas cagada de miedo!!... Maldita estúpida!!... Te aprovechas de que esta  celda nos separa... Pero de todas formas, no será por mucho tiempo... Te lo aseguro.

El Diario de Bill.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora