Cap. 40.

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04 de Enero del año 2008.

Querido diario :

Hoy por la mañana me desperté un poco desanimado, me dolía un poco la cabeza y estaba perezoso... Me duche a las nueve la mañana, ya que las peleas por agarrar el baño en las mañanas son un verdadero lío, Avril tarda demasiado duchandose, Geo deja el baño apestoso a mierda y cigarrillo, y es un asco entrar después que él, y por otro lado Tom qué deja todo inundado con agua, y para rematar no levanta la tapa del retrete, no sé qué mierda hace con el pene allí pero lo deja todo orinado.

Así que decidí ducharme de los primeros para evitarme todas las molestias de soportar sus desagradables hábitos.
Me preparé una taza de café y me puse en el pequeño balcón de la habitación a descansar un rato, a los pocos minutos despertó Tom, estaba todo sudado y con feo aspecto, no quise ni mirarlo ya lleva varios días enojado conmigo... Ni siquiera me dirije la palabra.
El motivo, ya lo sabes, quise ser yo mismo quien se lo contara, después de todo terminaría por enterarse de todas formas, y eso sería aun peor.

Se levantó de la cama dandole patadas a su ropa en el suelo, se veía de mal humor, salió de la habitación sin dirijirme ni siquiera una mirada y dio un portazo.
No tengo intenciones de rogarle nada, así que tendrá que seguir ignorándome.
Encendí un cigarrillo y seguí en la misma posición, estaba ya empezando a cabecear con el cigarrillo y la taza de café en mis manos cuando Avril apareció en nuestro cuarto.

- Buenos días Bill... Cómo estás? Has descansado?

- Buenos días cariño... Si gracias... Ustedes?? Cómo amaneció hoy George?

- Bastante mejor... Gracias... Bill quería decirte que hay alguien que quiere hablar contigo.

- Conmigo? Y quién es? De quién se trata?

- Es Ricky... La hice pasar... Esta esperándote en la sala.

- Hiciste bien... Muy bien... Dile que ya voy.

Qué hacía Ricky aquí?... Si la última vez que nos vimos se le veía en el cara qué le desagradaba verme... Por qué ahora resulta que necesitaba hablar conmigo?...
No quise darle más vueltas a mis dudas y me puse de pie para ir con ella y enterarme de una buena vez de que se trataba.

- Hola Bill.

- Ricky... Que linda sorpresa... A qué debo tu visita?

La salude con un pequeño beso en la mejilla y me acomodé a su lado, Avril se retiro de inmediato de la sala y nos dejó a solas para que conversamos.

- Verás Bill... Se qué es un poco extraño qué venga hasta aquí... Pero necesitaba hablar contigo.

- Te escucho... Puedes decirme.

Dudo unos cuantos segundos antes de comenzar a hablar, trago saliva, acomodó su cuerpo incomoda en el sofá y dijo.

- Es... Sobre Tom.

Cuando lo nombró sentí de inmediato un poco de miedo, Tom estaba metido en el baño, a pasos de nosotros, y estaba seguro que estaba oyendolo todo, no supe si advertirla, para evitarle un problema, o si dejar que hablara para que Tom la escuchara.
Ricky no me caía mal, pero se había estado comportando muy extraña últimamente desde que Avril la vio espiandonos en su casa, sabía que ella quería hablar de eso.

- Qué pasa con él?

Dije intentando disimular mi inquietud.

- Bill... Ustedes son hermanos, y...

- Qué sucede Ricky?... Qué es lo que te preocupa? Habla ya!

- Tom... Él... No es una buena persona... No le conoces...

El Diario de Bill.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora