RENDIDO (Un esposo virgen) // ZeeNuNew

9. Más que una venganza.

El sonido metálico de la puerta asustó a NuNew, quién se cubrió con las cobijas de la cama y rogó que nada malo le ocurriera.

Una fuerza que no pudo descifrar al principio, lo tomó del brazo y lo sacó de la cama, arrastrando todo a su paso.

Entre la penumbra, divisó la silueta y el perfume de Zee y eso lo tranquilizó levemente. 

Se dejó llevar y no lloró cuando en medio del arrastre, se golpeó la rodilla con la pata de la cama.

Zee lo condujo por el corredor de la mansión y se detuvo frente a una puerta. Se giró hacia NuNew, lo miró por un segundo y lo empujó dentro.

***

NuNew trató de acomodar su vista a la luminosidad que presentaba esa habitación totalmente desconocida para él. Cuando giró hacia Zee, quién aún se encontraba reclinado sobre la puerta, vio su entrepierna inflamada. En ese instante, NuNew sintió una ligera incomodidad en su garganta, ya había calmado esa hinchazón con su boca, pero está vez sintió que debía hacer algo más.

Lentamente se acercó a la cama y comenzó a olisquear el perfume de Zee sobre ella. Sintió la absurda necesidad de revolcarse entre las sedosas sabanas y pensó que las prendas que llevaba puestas, le estorbaban. Se deshizo de su pijama y comenzó a revolcarse sobre la delicada tela, como un gato, tratando de que el perfume se impregnara en su piel, pero algo lo distrajo; por el rabillo del ojo, vio que Zee comenzó a desvestirse. 

NuNew se quedó inmóvil, cegado en admiración por el torso desnudo de Zee y de pronto quiso abrir sus piernas hacia él.

Zee nunca pensó que iba a llegar tan lejos, se había prometido consumar una venganza contra su padre, pero esto no lo era. Su plan era perturbar a Norban Panich, pero en lugar de eso, había llevado a NuNew a su habitación y se estaba preparando para hacerlo suyo.

Una voz en su cabeza le decía que después de esto, no habría vuelta atrás, pero su cuerpo estaba babeando desde que vio a NuNew desnudarse sensualmente frente a él, abierto y completamente entregado.

El mayor, ya no podía contener más esa fuerza salvaje que palpitaba entre sus piernas, NuNew era un veneno en su mente y sus pensamientos se volvían erráticos cuando estaba frente a él, pero esto era totalmente diferente a la locura. Esa hermosa criatura lo instaba a cometer un crimen. ¿Alguien en su lugar podría resistir?

Se lanzó hacia la cama como un lobo sobre su presa y dejó de sufrir cuando introdujo su hombría en el delicado cuerpo del menor.

NuNew sintió un profundo desgarro en su interior, gritó y se estremeció varias veces pero a Zee no pudo impórtale menos, continuó blandiendo su miembro contra las inexpertas paredes del joven, mientras se deleitaba con sus agónicos gritos.

Zee había compartido su cama con muchas mujeres, todas habían gemido bajo su cuerpo, pero era la primera vez que alguien gritaba de esa manera y también era la primera vez que se sentía tan excitado y poderoso. Zee no se conformó con tomar el cuerpo de NuNew una única vez, para la quinta ronda, NuNew estaba completamente agotado y dio muy poco de sí. Zee descargó su blanquecino fluido en el interior de NuNew y se quedó profundamente dormido. Jamás en su vida se había sentido más complacido y satisfecho.

***

Cuando NuNew despertó a la mañana siguiente, se sentía fatal: tenía una aguda mordida en el hombro, el cuerpo cubierto de sudor y saliva seca; y las caderas le dolían punzantemente, sin mencionar el ardor persistente que sentía en su parte más profunda.