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Febrero.

La mayor parte del tiempo fue... Perder el tiempo en el sofá...

Parecían pequeñas rocas. No habían querido moverse debido a su estado melancólico. Aunque Sonic hizo su mejor esfuerzo por levantarse y cargar a Shadow de un lado a otro ante las necesidades de cada uno.

Y Shadow...

—Parece más ansioso.— El azabache había estado más activo que de costumbre.

Su gesto seguía siendo triste, pero no paraba de hacer cosas de aquí para haya aun cuando no había nada que hacer. De alguna forma, ordenó los libros que estaban en la sala por colores, parecía un arco iris.

—Seguro que es su energia.— Susurro el abuelo, esperando que el azabache no los escuchara.

Sonic seguía preguntándose sobre esa energía que crecía dentro del pequeño cuerpo del erizo, a veces lo tenia tan hiperactivo que se asustaba cuando caía dormido por el cansancio.

—No le dará algo malo... ¿Verdad?— Siempre le tenia un ojo encima. A pesar del rostro ojeroso del bicolor, este siempre se levantaba ante las insistencias que le daba, pero también tenía miedo de que esa energía desapareciera y Shadow ya no abriera los ojos...

—No.—

Esa sola respuesta no lo tranquilizó, sabia las irregularidades que tenía y sabia que últimamente pasaba sus noches con el abuelo para mantener un equilibrio, pero no estaba funcionando.

—¿Ya le dijeron a Maria?— No se han comunicado con ella por video llamada para que se acostumbrara, pero los mensajes entre ellos estaban.

—Sí.— Frunció el ceño por las bastas respuestas.

Mi pequeño amor. [Pausada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora