Mi pequeño amor.

5

Ese día estaban en la cocina con Ivo Robotnik, el desgraciado lo había levantado temprano en la mañana, se cotoneaba de un lado a otro mientras tarareaba una canción que desconocía.

—¿Porqué tan contento?— Termino de batir con su supervelocidad la crema qué le habían dejado encargada.

Miro de nuevo a Ivo, quien seguía dándole la espalda y rápidamente paso su mano desnuda por suave crema batida, lamió sus esponjas con cuidado, saboreando el dulzor y agitando su colita, encantado.

—Termine de programar a Sage.— Su tono era orgulloso e infló el pecho.

—¿Sage?— Desinfló el pecho, recordando que el erizo ceruleo nunca había entrado a su habitación.

—Después te la presento. Es encantadora.— Sonrió y se dio la vuelta, su gesto rápidamente cambio a uno serio.

Sonic lo veía sorprendido con el pulgar en la boca y las orejas alzadas.

—¿Qué hacias?— Lentamente saco su dedo y limpio los rastros de saliva y crema en su sudadera, sonriendo ligeramente.

—Sólo... Me estaba dando un baño...—

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Veia a Shadow dormir en sus piernas. Parecía tan apacible, tan lindo...

Pero quería morderlo, lo tenia abandonado en las noches sin explicación alguna y a veces lo enojaba.

Hacia frio, ambos necesitaban de mantas y sudaderas, pero ya se había acostumbrado a la cercanía del azabache y... Y...

Comenzó a agitar lo con enojo, no lo dejaría dormir en paz en mucho tiempo.

—¡Despierta!—

—¡No me agites!—

Se detuvo y vio al azabache, tenia las puas alzadas por el susto y... Parecía querer vomitar...

—¿Estás enfermo?— Shadow negó, cubriendo su hocico con ambas manos y luego pareció calmarse, suspiró.

—¿Porqué me despertaste?— El rubí lo veía furico. Esperaba poder dormir hasta la tarde, sus estudios comenzaban a alargarse y no había tenido oportunidad de estar con el erizo que olía a manzanilla.

Quería aprovechar...

—¡Estoy preocupado!— Solto sin cuidado, sorprendiendo al bicolor—. No puedo dormir contigo, te desapareces con el abuelo en su estudio y... Te vez muy mal... Evitaste vomitar...

—No deberías de preocuparte por esas cosas, son temporales.— Comenzaba a acurrucarse de nuevo, pero el ceruleo rápidamente se levantó, empujando lo en el proceso.

—¿¡Qué no me preocupe!? ¡Es fácil para ti decirlo, rata de laboratorio! Desde que te conozco has estado mal, tu energía se a estado alterando y el hecho de que me gustes no hace las cosas más fáciles. ¡Mirate! Sólo nos tenemos a nosotros y parece que me evitas.— Jadeo molesto, tenia guardado más cosas, pero la cara sorprendida de Shadow lo estaba cohibiendo—. ¿Porqué me miras así?

—Repitelo.— Lo vio como un bicho raro, ¿Acaso le gustaba que le gritaran?

Tendría sentido... Nunca había escuchado a Maria gritarle enserio...

—¿Qué?—

—Todo.—

—¿T-Todo?— Ambos se fruncieron el ceño, no iban a ningún lado—. ¿¡A donde quieres llegar!?

—¡Maria no te contó!— El azabache le gruñia con las orejas hacia atrás, eso lo hizo ponerse alerta—. Fue Ivo o el abuelo, dilo.

—¿Q-Qué?— Empezó a retroceder, lo que menos quería era pelear con él, la diferencia de fuerza era completamente distinta.

—"Rata de laboratorio" "Tú energia se a estado alterando" ¡Lo sabes!— Paso saliva.

"El hecho de que me gustes no hace las cosas más fáciles"

Se maldijo, acababa de confesarse de la peor manera.

Quería confrontarlo, no había mucho que hacer, pero no había conectado su lengua con su cerebro y terminó diciendo lo que menos quería, además... Shadow estaba molesto.

Hizo lo mejor que sabia hacer...

Lo empujó y salió huyendo de ahí a toda velocidad. Todavía podía seguir escuchando los gruñidos de Shadow cuando subió las escaleras.