Capitulo 8
Ayra
-¿Podemos hablar?.
La voz de Dylan se escucha en el silencio de la habitación.
Me incorporo y lo veo en el umbral de la puerta sin decir nada, asiento sin decir nada, me siento cual indio encima de cama y espero a que entre en la habitación sin decir nada, se sienta en el borde de la cama y me mira.
-¿Estás bien?-pregunta mirándome
-Si, simplemente estoy cansada.- le respondo intentando controlar los latidos de mi corazón
A veces me olvido de que estoy entre tanto hombre lobo y que pueden escuchar mucho más que un humano, menos mal que no leen los pensamientos, porque si no estaría en un buen problema.
-¿te ha gustado Mara?- pregunta
No comprendo la pregunta, teniendo en cuenta de que es algo por destino no porque nosotros decidamos buscarla, los hombres lobos tienen escrito a su mate, es algo que la diosa luna decide incluso antes de nacer.
-Es tu mate, supongo que mi opinión no cuenta- le digo- la diosa luna es la que decide con quién pasaréis el resto de vuestra vida
-Lo sé, pero aún así me gustaría saber la tuya, eres como mi hermana pequeña.- dice
Esa frase se clava como daga en mi pecho y ahuyentando las lagrimas de mis ojos, le sonrío con mejor se me da en momento de incomodidad y dolor, no puedo decirle que me gusta porque seria mentirle, pero tampoco puedo decirle que no quiero que esté con ella, sería egoísta de mi parte, aunque me duela he de aceptar que es el amor de su vida y solo quiero que sea feliz.
-Es tu mate, solo espero que seáis felices.- le digo de corazón
Él me coge la mano y yo le sonrío, ahora mismo solo quiero cogerle del cuello de su jersey y darle de collejas hasta cansarme.
-¿Te importaría dejarme sola?- le pregunto- quiero dormir un rato, me duele la cabeza y me apetece estar sola- le digo
No quiero sonar borde ni nada por le estilo, pero mi cabeza va a explotar y solo tengo ganas de cerrar los ojos y dejar que mi mente descanse por un momento.
-Claro, te vendré a avisar cuando sea la hora de cenar.- dice levantándose de la cama
Y encima se quedan a cenar, pienso internamente.
le sonrío como mejor se y le asiento con la cabeza, este sale de la habitación y cierra la puerta detrás de si. Joder como duele, siento que de alguna manera me he despedido de él sin que lo sepa, solo espero que sea feliz, que los dos lo sean.
Jodida diosa luna.
Con lágrimas en los ojos, intento descansar y que el dolor de cabeza se disipe un poco, con el nudo en la garganta cierro los ojos y me dispongo a dormir.
***
Dylan
Cierro la puerta y bufo, pequeña mentirosa, se que no le gusta, la conozco lo suficiente como para saber que esta fingiendo la sonrisa y que no quiere que esté con ella.
Cuando he llegado y la he visto bajar con esas trenzas y accesorios en el pelo la he visto tan bonita que no he podido evitar grabarme esa imagen en mi cabeza, Mara se ha dado cuenta y sin decirme nada me ha sonreído, sabe que hay algo con ella y no puedo evitarlo, no la veo como una hermana pequeña y me siento el peor ser humano por mentirle de esa manera, pero no puedo no hacerlo, mi futuro ya esta decidido, y no puedo hacer nada, a pesar de querer salir huyendo.
Bajo las escaleras y me reúno con el resto en el comedor, Adalia pregunta por Ayra y le digo que está durmiendo en su habitación, ella asiente y no dice nada, nos ponemos a ver una película y se nos pasa la tarde volando, pedimos pizza para cenar y mientras preparamos la mesa aparece Ayra en chándal y con los ojos llorosos.
-¿Papá, tío Edwin podemos hablar?- dice ella en un susurro
Todos la observan sin decir nada, Adrien y Edwin se levantan de la mesa y se va con Ayra al despacho.
Mi lobo está inquieto y sé que algo no va bien.
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Ven y ámame (MTUH parte 3)
Loup-garouEl amor llega cuando menos te lo esperas, eso le pasó a Dylan, cuando creía que todo estaba perdido, su vida cambió de repente. Tercera parte de la saga (MTUH) Obra original y completamente mía, no se admiten adaptaciones ni plagio.