La caída de un imperio - Un reencuentro fortuito (un tiempo para nosotros)

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Atención ⚠️⛔️ Este capítulo contiene escenas eróticas con contenido sexual. Leer bajo su propia responsabilidad.

Los personajes no me pertenecen son creación del gran Akira Toriyama. La trama e historia si son idea original mía.

"Un tiempo para nosotros, algún día existirá, cuando las cadenas se rompan por el coraje nacido de un amor libre. Un tiempo en el que los sueños, negados durante tanto tiempo puedan florecer a medida que revelemos el amor que ahora debemos ocultar.

Un tiempo para que por fin veamos una vida que valga la pena para ti y para mí. Y con nuestro amor a través de lágrimas y espinas perduraremos mientras pasamos por cada tormenta.

Un tiempo para nosotros, algún día habrá un mundo nuevo, un mundo de esperanza brillante para ti y para mí. Un tiempo para que por fin veamos una vida que valga la pena para ti y para mí.

Un tiempo para nosotros, algún día habrá un mundo nuevo, un mundo de esperanza brillante para ti y para mí... — A time for us, Andy Williams"

Respiró los aires de libertad que esa nueva oportunidad de vida le ofrecía, después de haber vivido tanto tiempo en cautiverio, verse ahora como un sujeto libre era algo así inaudito, era un sueño hecho realidad.

5 años, cinco malditos años, lo que significaba 60 meses ó 1825 días terrestres, ese fue el tiempo que lo mantuvieron cautivo dentro de la prisión espacial en lo que ese pequeño y miserable planeta llamado Tierra se había convertido.

1825 días, 43800 horas, 2628000 minutos de dolor, de tortura, de incertidumbre, eso fue lo que Vegeta vivió en ese frío y miserable lugar.

Urdir el plan y contribuir a derrotar al tirano lo habían llevado ahí, pues aunque aunque él no lo hizo sólo, si contribuyó a lastimar al tirano gravemente  y eso permitió a que poco tiempo después sucedieran las cosas.

A su mente llegó el momento de la batalla donde casi llevó a cabo todos sus sueños antes de que todo se fuera al demonio:

"Ya había alcanzado la sala de operaciones donde Freezer se alojaba.

El tirano sonrió — ¡Vaya monito! Nunca creí realmente que algún día llegarías a ser tan tonto para morder mi mano, no cabe duda los simios como tú jamás tendrán demasiada inteligencia...—

Intentó seguir molestando al saiyan pero Vegeta tenía demasiado tiempo esperando ese momento, pelearon fuertemente, la clave como Bulma le había dicho tantas veces era no permitir que el tirano cambiara de forma, su momento más débil sería precisamente cuando intentaba hacer el cambio de fase.

Ella había estado espiando, escuchando a escondidas las pláticas que Freezer y su padre el rey Cold tenían cuando se enteró de ese crucial detalle.

Durante la batalla Freezer se percató de dos cosas: Vegeta era más fuerte de lo que le había mostrado antes y de alguna manera el simio estúpido había aprendido a leer su forma de pelea. Alguien dentro de su base lo estaba ayudando de eso no cabían dudas.

El tirano era inteligente y sabía que debía ser alguien de su equipo de científicos la cuestión era quién.

No tuvo demasiado tiempo para pensar cuando un rayo de ki lo alcanzó — ¡Maldito mono insolente!— Fue todo lo que dijo antes de aventarle un rayo de energía de su propio ki y comenzar a buscar el cambio de transformación, se había hartado de jugar con el simio y ahora quería acabarlo.

Ese era el momento que Vegeta había estado esperando; lanzó su propio ataque, no dando oportunidad a Freezer de transformarse — ¡Galick Ho!— Gritó con el alma.

Mil instantes junto a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora