Hoy quiero ver tu reflejo en mis pupilas, que ardas en ellas, que sientas mi fuego.
Quiero ser la culpable de todos tus pecados, que te albergues en mis piernas y sientas mi idilio, mis ganas hacia ti.
Quiero que sientas mi calor, mi paraíso, mi infierno, que calmes mi sed y clames la humedad de mi sexo con tus besos.
Quiero que tiembles antes la posesión de mis labios a tu hombría, que sea mi lengua quien te alborote y que mis dedos jueguen con tu boca mientras te susurro a tu oído. Me vuelves loca. Por eso hoy quiero me supliques.
Me habites.
Me sometas.
Me tomes.
Me penetres en cuerpo y alma.
Hoy quiero ser tu perversa favorita Hoy quiero ser tu perfecta adición.
Hoy quiero.