°Entre Dragónes y Torres°

°Entre Dragónes y Torres ° Parte 29: Una Vez Soñé

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Parte 29: Una Vez Soñé

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Cuando uno imagina su boda ideal normalmente sería organizada con el apoyo de sus padres, con sus colores favoritos y con un lugar lleno de las personas que más aprecian y aman y que te acompañan en el momento más importante de tu vida.
Con una ceremonia encantadora dónde uno se unirás a su pareja seguido de un baile lleno de alegría y un banquete donde todo el mundo brindará por tu felicidad.

Eso imaginaba Harwin de niño cuando veía a sus padres juntos.

Eso era lo que Laenor le decía a Joffrey que tendrían cuando eran niños imaginando el futuro.

Eso era lo que Rhaenyra imaginaba de niña cuando su madre le contaba historias sobre el matrimonio.

Pero las cosas no siempre son como uno imagina de niños.

Laenor y Rhaenyra lo sabían mejor que nadie, su primera boda no es ni de cerca el mejor momento de sus vidas, hubo apoyo por parte de ambos padres claro pero porque a ellos les convenía la unión, las decoraciones no eran lo que ellos habían pedido, y después del incidente con el jodido Cole no quedó ningún ser preciado para ambos que los acompañará, su ceremonia de bodas fue apresurada y ninguno de sus banquetes fue algo feliz más bien incómodos y sombríos. Por eso ambos se habían esmerado en que está boda fuera perfecta. No solo para reemplazar los malos recuerdos del primero si no porque Harwin, su Harwin, merecía una ceremonia y banquete a lo grande. Digno de un rey.... O en este caso de un futuro rey consorte.

Ambos tomaron las riendas en los planes solo permitiendo que sus padres se involucraran en lo esencial, con Laenor encargándose de la decoración y Rhaenyra ocupada con los servicios de cocina. Querían consentir al Alfa que había llegado a alegrar sus vidas y querían darle una boda tan grande y perfecta que recordara cada día de su vida como el momento más feliz.

Por eso ahora que se acercaba el primer baile de Harwin y Rhaenyra como esposos Laenor no podía dejar de temblar y vigilar cada maldito movimiento de Sir Cole o como él lo llamaba, el perro de la reina. Los malos recuerdos lo estaban atormentando.

- ¿Ya vas a decirme porque estás tan nervioso?

Rhaenyra había tratado de distraer a Laenor de sus pensamientos pero lo conocía, y podía ver a dónde iba su mente.

- Miralo Nyra, tan tranquilo como si aún le quedará honor alguno al bastardo.

- Laenor...

- Pero yo sé que planea algo.

- Laenor...

- Lo siento en mi interior Nyra, está esperando que bajemos guardia...

Las manos de la princesa tomaron suavemente su rostro y lo giraron para quedar frente a frente. Rhaenyra lo miro angustiada y eso solo hizo que Laenor se sintiera peor, el no quería preocuparla.

- Laenor por favor, no puedes pasar toda la boda así... Se que tienes miedo de que se repita lo de aquella vez, yo también lo tengo pero no podemos dejar que Harwin nos vea así o no dudará en atacar.

Laenor se soltó con fuerza.

- ¡Perfecto! Es mejor que Alfa saque al perro desgreñado que se para frente a nosotros como inocente.

- Laenor sabes que si hace algo Alicent...

- ¿Crees que le importa a esa perra Nyra? ¿No ves lo que está haciendo? ¡La muy perra quiere marcarte y tú la dejas!

Rhaenyra lo miro molesta.

- Yo no....

- ¡Tu si!- Laenor la miro exasperado sorprendiendo a Rhaenyra que nunca lo había visto tan alterado.- Eres una Omega sin marca Nyra, un alfa puede reclamar a un Omega sin marca. Y le estás dando poder sobre ti ¿Cuántas veces tengo que decirte que lo que haces con Daeron está mal? ¿Crees que no ví como reaccionaste cuando trato de llevarse a Daeron?.