°Entre Dragones y Torres °Parte 13: Rhaenys, Rhaenyra y Lucerys

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°Entre Dragones y Torres °

Parte 13: Rhaenys, Rhaenyra y Lucerys

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Las fiestas en honor al nuevo príncipe Velaryon estaban en su apogeo cuando el rey anunció las nuevas nupcias de la heredera al trono. Para sorpresa del reino con un Alfa de una casa menor, aunque muchos sospechaban que esto era debido a los rumores de bastardia de los hijos de la princesa y no porque estos fueran destinados precisamente, habían pasado mucho tiempo juntos antes de que ella se presentará y nunca hubo algo que indicará que estaban destinados a estar juntos, los susurros y murmullos empezaron a surgir y rápidamente llegaron a oídos de toda la corté, más sin embargo estos prontos fueron callados rápidamente por los susurradores de las calles de  Kingslanding quienes compararon al primogénito de la princesa con el padre de la difunta reina Aemma, Lord Rodrik Arryn y al más nuevo príncipe con Lady Jocelyn Baratheon la madre de la princesa Rhaenys.

Todo gracias al nuevo maestro de susurros declarado por la princesa, Lord Larys Strong.
Quien casi siempre se podía ver acompañado del hijo mayor de la princesa.

La boda se llevaría a cabo en dos lunas más, muchos se sorprendieron cuando el rey anunció que la ceremonia de unión se llevaría a cabo dentro de la fortaleza roja y no en rocadragon cómo muchos creían incluso los novios parecían sorprendidos pero nadie se negó al rey, por el momento el torneo en nombre del principe Lucerys estaba en su mayor momento de disfruté y todo el mundo, nobles y plebeyos, podían ver cuan felices y enamorados estaban la princesa y sus consortes. Se decía que nunca se había visto brillar de esa manera a la joven princesa o que el joven Velaryon nunca había lúcido tan increíblemente feliz como lo era ahora, los tres eran una encantadora... ¿Pareja? Muchos aún no sabían cómo llamarles pero todos concordaban que los tres sin duda se complementaban completamente.

Rhaenyra estaba extasiada, por fin su vida estaba volviendo a tener sentido y todo gracias a esos dos maravillosos hombres, Laenor su mejor amigo, su hermano y confidente y Harwin su protector, su ancla y el amor de su vida, los amaba a ambos y amaba la familia que eran junto a sus niños, realmente no podría pedir nada más.

Pero aunque la felicidad parecía rodearlos había algo que esta nueva familia no sabía, y es que  diversas personas ya movían sus fichas para acabar con su felicidad, todo por un juego de poder.

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Rhaenys se mantenía callada mientras veía a su sobrina arrullar a su hijo menor, había pasado una semana de que comenzaron las festividades por el nacimiento del niño y difícilmente había podido estar a solas con su sobrina por más de 10 minutos así que mientras Rhaenyra se encontraba alimentando a su hijo Rhaenys decidió hablar con ella. Ya era hora de actuar.

Una vez que las sirvientas y doncellas se fueron Rhaenys habló.

- Tu padre me dijo que deseabas renunciar a tu derecho de heredera princesa.- Rhaenyra sonrió sin mirarla.

- Sin duda lo hizo.

- ¿Así que es verdad?

- ¿Y que si lo fuera?

- Estás conciente de lo irresponsable que es esa decisión, te creía más inteligente que esto niña.

Rhaenyra desvió su mirada de su hijo y se enfocó en la princesa mayor.
- Princesa Rhaenys ¿Cuál es el verdadero motivo de esta charla?

La mujer sonrió. Feliz de al fin tener la atención de la joven.

- ¿Acaso debe haber un motivo oculto para que yo me interese en tal asunto?

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