Broly x Cobra Kai

Capítulo 7: Decisiones.

Los personajes aquí nombrados no son de mi autoría. Créditos a sus respectivos autores. Yo sólo soy un fan, que escribe esta historia para entretener a otros fanáticos.

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Ya casi finalizaba el verano y las clases estaban a la vuelta de la esquina.

En la playa, bajo el caluroso sol del verano, Sam y Broly charlaban, a la vez que realizaban catas.

—¿Cómo fue que lograste evitar que Tory me chocara esa noche? —preguntó Sam, interesada por el movimiento instintivo del peli~negro que ahora se había dejado puesto los aretes, más que nada, porque a Sam le gustaba.

Broly recordó el momento. Cuando estaba con Sam se sentía calmado, ni siquiera sentía la necesidad de estar alerta por todo. Su cuerpo sólo reaccionó por sí solo. No entendía bien por qué ocurrió esto.

—No lo sé. Fue sólo un instinto del momento —habló, algo perdido en sus pensamientos.

En una secuencia de cortas imágenes, Broly intentaba recapacitar sobre lo que pasó ese día, o mejor dicho, esa noche.

Lo único que recordaba era "calma". Eso le provocaba Sam a él. Le daba tanta tranquilidad que, aunque sean sólo instantes, se despejaba de todo pensamiento.

Entonces quiso poner a prueba eso.

—Sam... —llamó Broly.

Ésta hizo caso y miró a su novio.

—Dime, ¿qué ocurre?

Broly miró al rostro a su novia. Suspiró y luego habló.

—Quiero que me lances una patada alta. Intentaré poner a prueba lo que pasó esa noche.

Sam aceptó, aunque tenía dudas aún.

Broly vio a Sam fijamente. Su rostro algo redondo, su piel tan suave que estaba algo húmeda por la transpiración, su cabello, sus ojos, sus labios.

Al final, Broly se quedó observando los carnosos labios de Sam, ignorando que ésta ya le dio la patada.

Como era esperable, sin ningún tipo de guardia, Broly recibió el golpe y cayó al suelo.

—Ay no... ¿estás bien? —preguntó Sam, algo preocupada.

Broly rió, aún tirado en el suelo y cerrando sus ojos con fuerza.

—Buena patada. Estoy seguro que podrías dislocar la mandíbula de cualquiera con ese golpe —halagó Broly.

Él abrió sus ojos y volvió a mirar a su novia. Otra vez, sus labios formando una sonrisa, distrajeron su mente. Luego, como Sam estaba agachada para saber si él estaba bien, Broly bajó su mirada y pudo notar algo más allá de la remera de la muchacha.

Esto casi enciende fuego por dentro del adolescente.

El chico se sonrojo de sobremanera, volteando su rostro y enterrando su cara en la arena.

Sin saber las consecuencias, las cuales fueron haber tragado arena. El chico pronto sacó su cara y empezó a toser los restos que aún tenía en su boca.

Sam se preocupó y socorrió a su novio. Luego, ambos comenzaron a reír por la rara escena que pasó.

—Esa chica... Tory... —habló Broly—. Creo que tiene serios problemas.

—Es una mala persona. Y para completar, está en Cobra Kai —contestó Sam.

—Tal vez. Aunque a veces muchas personas ocultan su dolor, detrás de unos puños enfurecidos —dijo Broly, intentando hacer una metáfora de por qué creía que esa chica era mala con Sam.