Broly x Cobra Kai

Capítulo 17: Salvar el torneo.

Los personajes aquí nombrados no son de mi autoría. Créditos a sus respectivos autores. Yo sólo soy un fan, que escribe esta historia para entretener a otros fanáticos.

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Con la vuelta de Sam al karate, y el nuevo dojo de Johnny, ambos bandos volvían con todo para dedicarse al entrenamiento.

Pero no eran los únicos, pues Kreese también enseñaba de lo suyo a sus estudiantes. Un karate agresivo, sin piedad...

Los tres dojos entrenaban a su estilo.

Daniel les hablaba de la defensa, y que de eso trataba el verdadero karate. Además de que olvidaran la venganza y el rencor.

Johnny, por su parte, enseñaba la rudeza, pues su dojo era una muestra de eso. El águila, es el animal que al tener una presa enfrente, no duda en ir a por ella.

Kreese, por otro lado, enseñaba a sus estudiantes a no tener piedad. Ahora que Johnny ya no iba a volver a Cobra Kai, y que Daniel reabría su dojo, los enemigos atacarían por todos lados a Cobra Kai, por lo que los chicos tenían que estar preparados.

(...)

En la escuela, Miguel volvía a ingresar. Muchos de Cobra Kai lo notaron y parecían no estar tan cómodos con él allí, de hecho, el mismo Halcón parecía distante a su antiguo amigo.

Quienes si lo recibieron de buena manera, fueron Sam y Robby. Claramente Sam seguía una distancia acorde, aunque Robby si era más amistoso.

Otro que sorprendió, fue ver a Demiyari allí.

Por alguna extraña y macabra coincidencia, el peli~verde ahora ingresaba a su escuela.

—Ese tipo será un verdadero peligro —dijo Robby.

—Intentó romperme la mano... Es un monstruo... —agregó Sam, recordando lo que pasó.

—Parece alguien peligroso y de pocos amigos... —observó Miguel.

Pronto, notaron que ese psicópata iba donde los demás de Cobra Kai, y todos parecían guardarle respeto.

—Está bien... Si intenta hacerles algo, yo voy a protegerlos —dijo Broly.

Como casi siempre, se lo notaba tranquilo. Aunque luego de lo que pasó con su último coma, el chico parecía tratar de dominar más sus emociones.

Obviamente le era difícil si estaba Sam cerca, pues ella si lo alteraba de cierta manera.

—Hola, ¿cómo te sientes? —preguntó ella, tomándole la mano a su, otra vez, novio.

—Estoy mejor... Aunque, esto es extraño... Casi parece que volver aquí es un camino al hospital otra vez —bromeó Broly, riendo algo nervioso, cosa que hizo reír a Robby y Miguel por igual.

—Por cierto... —habló Robby a Miguel—... ¿Cómo fue que volviste?

Miguel miró a Broly y luego a Sam.

—Las cosas se aclararon tras un pequeño juicio y, la mamá de Broly y los padres de Sam ayudaron bastante.

Broly sonrió. —Es bueno que vuelvas donde están tus amigos.

Miguel negó.

—Los de Cobra Kai se han vuelto salvajes e irreconocibles. Ya no son esos amigos que recuerdo de una vez...

—Bueno... Ahora nos tienes a nosotros —dijo Robby.

Los cuatro comenzaron a caminar por el corredor.