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Una y otra vez
Leía esa notificación una y otra vez, desde hace ya casi una hora
Él vio la foto, la que yo misma tomé aquella noche, y decidí mandar después de tanto cuestionamiento interno
Charles Leclerc, nacido en Mónaco, al igual que yo; hace veintiséis años, piloto de Fórmula Uno por la Scuderia Ferrari; doce millones de seguidores en Instagram y, probablemente, millones de mensajes entrando a su cuenta a toda hora
Y vio mi foto
Me vio a mi, frente a un espejo, con un conjunto de lencería rojo, como los colores de su equipo
Y yo solo quiero gritar
...
cuatro días antes
Sara escupe el agua de su boca y yo alejo la pantalla de mi celular de ella. La miro con incredulidad al escuchar su tos, pero no puedo ocultar la sonrisa que se dibuja en mi cara aunque lo trate
-Me hubieras mandado esa foto a mi- se queja buscando aire y río
-Quizás la hubieras valorado más que Nicolas
-Sin dudas- afirma, más calmada
La foto en cuestión soy yo
Pero en la tina del baño de mi casa, bajo el agua y completamente desnuda. Con un poco de espuma cubriendome los pechos, y un poco más abajo del abdomen
Justo en esa tarde en la que me bañaba, luego de un largo y agotador día, me vi en el espejo del baño y me sentí lo suficientemente bien conmigo misma para animarme a sacarme una foto y mandarsela al chico que me atrae hace mucho tiempo
Nicolas es un compañero de universidad, con el que he hablado los últimos meses, y que ha venido a visitar mi habitación por la noche, algunas veces también. No tenemos una relación más allá de una amistad extraña, porque no hablamos lo suficiente, pero tenemos esa confianza en particular que me hizo creer de alguna manera que mandar esa foto era un buen puntapié para una invitación a hacer algo en la noche
Recibí una respuesta muy agresiva de su novia, la cual no sabía que tenía
Y ella no sabía que yo existía
-Que desperdicio- se queja mi amiga en un bufido
-¿De verdad es tan buena foto?- cuestiono volviéndola a mirar
-Muy buena, pero no hablo de la foto- aclara- Nicolas es el desperdicio
-Ah, claro que si, es hombre- digo subiendo mis hombros- La próxima te hago caso y te la mando a ti
La rubia ríe, recostando sus brazos en la barra de la cocina, y niega con su cabeza
-Eres preciosa, pero soy tu amiga y me gustan los desperdicios, así que no puedo hacer nada con ella- contesta y esta vez río yo
Me acerco al otro lado de la barra para darle una taza de café y me sonríe en forma de agradecimiento, pero ambas nos damos la vuelta al escuchar lo que parece un himno en la televisión
Efectivamente, el himno de España está sonando en el resumen deportivo del noticiero, cuando muestran el podio de la Fórmula 1 de ayer. No suelo ver las carreras, porque solo entiendo un poco sobre el mecanismo de ellas, pero conozco a los pilotos por entrevistas y redes sociales
Así que sonrío cuando veo a Carlos Sainz, uno de mis favoritos, irradiando felicidad en su cara y con la bandera de su país colgada en los hombros; y es que no es para menos, porque se quedó con la pole en su país
-Que guapo- murmura Sara y asiento- ¿Ese es el que te gusta?
-No, el que me gusta es Leclerc
-¿No quedó en el podio?- cuestiona confundida- ¿No va primero en el campeonato?
-Con Verstappen comiéndole los talones, pero si- respondo en un suspiro- Quedaron afuera en la primera vuelta, chocaron en la largada
-¿Y están bien? ¿O se hicieron daño?
-Seh, están bien...just an inchident
Sara me mira con las cejas fruncidas
-¿Qué acabas de decir?- carcajeo y le doy un sorbo a mi café
-No me hagas caso
El podio, completado por Russell en segunda posición y Norris en tercera, es sustituido por la imágen de Charles, hablando con un periodista
Tiene el cabello un poco revuelto, sus mejillas rosadas y las marcas de su casco alrededor de su rostro. Sus ojos están cansados y su boca se entreabre con la respiración un poco agitada, esperando a que el periodista frente a él termine su pregunta
Sencillamente me parece el hombre más hermoso que el mundo alguna vez conoció
Charles explica que se siente decepcionado por lo que pasó, y parece que sus gestos se derritieran lentamente
-Deberías mandarsela a él- habla Sara, pero no estaba prestando atención
-¿Qué?
-La foto, deberías mandarsela a él- repite y río irónicamente- ¿Qué? Se ve un poco triste, quizás eso le de un poco de...estímulo
Vuelvo mis ojos a la pantalla, el periodista dice algo que hace sonreír un poco a Charles, y mi corazón da un salto en mi pecho
Las palabras de Sara resonaron en mi cabeza toda la noche, y aunque tengo muy en claro que mandarle un mensaje por Instagram a un piloto tan famoso como él es técnicamente inútil, delivero que no tengo nada que perder
Así que al día siguiente, me creo una nueva cuenta, la cual no tiene más información que mi nombre; y al salir de la universidad, compro un conjunto de lencería rojo que me pongo cuando llego a casa, frente al espejo
Celular en mano, enfoque...y click
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Enfoque - Charles Leclerc
Fanfiction"Celular en mano, enfoque, y...click" Donde Tiziana le manda fotos a Charles...un poco subidas de tono.