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Capítulo 38: Preparación de la fiesta

Blitz y el apartamento de Loona…

"Y eso debería ser suficiente". Dijo Loona mientras dejaba las tijeras.

A sus pies había adornos de cabello, debido a que se cortó el cabello, dejándolo corto.

Loona se miró en el espejo del baño, pasándose la mano por el cabello, posando seductoramente.

"Quiero decir, a Naruto le gusta, así que supongo que lo mantendré así por un tiempo". Pensó Loona con una linda sonrisa antes de arrodillarse y limpiarse el cabello.

Una vez que terminó, Loona salió del baño y vio a Blitz salir de la cocina con un plato de comida.

"Oh, Looney", dijo Blitz mientras abría una cerveza. "¿Decidiste mantener tu cabello corto?"

"Sí, creo que lo haré breve por un poco más de tiempo". Respondió Loona mientras entraba a la cocina, tomando una cerveza antes de entrar a la sala de estar, donde Blitz se había sentado a mirar televisión.

Bebieron en silencio, los únicos sonidos eran el de la televisión y los cubiertos que Blitz usaba contra su plato.

"Entonces..." dijo Loona con cautela. "¿Me vas a decir por qué estás tan irritado últimamente?"

Los ojos de Blitz se entrecerraron con un suspiro.

Él no respondió al instante, aparentemente repasando lo que quería decir.

"Papá…" murmuró mientras ponía su plato sobre la mesa de la lámpara. "Papá acaba de encontrarse con alguien a quien nunca quiso ver hoy, y también está..."

El pauso.

"¿Bombardeo aéreo?"

"Tu novio es amigo de esta persona..."

"Oh, ¿te enteraste de Verosika?"

"Si yo…"

Los ojos de Blitz se abrieron como platos; La boca se frunció con fuerza con la confusión entrando en sus ojos antes de girarse hacia Loona.

"¿Cómo supiste que era el Primero de Mayo?"

"Oh, la conocí hace un tiempo, Naruto y yo tenemos una relación policon ella..." admitió Loona.

El silencio no era malo, Loona esperaba que Blitz le gritara inmediatamente en la cara.

"..."

Loona sintió un extraño tirón en el estómago cuando Blitz se puso de pie y la miró con el puño cerrado.

"Bombardeo aéreo…"

Dicho diablillo simplemente pasó junto a su hija y se dirigió a su habitación.

La culpa invadió el núcleo de Loona mientras colocaba sus piernas en la silla.

Mientras tanto, Blitz yacía en su cama, hecho un ovillo.

Una vorágine de emociones se arremolinaba dentro de él mientras intentaba, INTENTAba concentrarse en dormir.

Pero fue una lucha, incluso para él.

La noche avanzó y, finalmente, amaneció en el Anillo del Orgullo.

Loona cerró la puerta de su apartamento y Blitz ni siquiera estaba despierto, durmiendo en su habitación.

Habiendo dejado una nota en la mesa con algo de desayuno, el teléfono de Loona sonó y ella contestó.

"Sí, lo tengo. Sí… sí… Sí, estaré afuera cuando ustedes dos vengan".

Llorando por la Luna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora