31

2.2K 268 309
                                    

11:49pm

—Naoya —jadeé

Sus manos apretaron mi trasero haciéndome soltar otro gemido.

Cuándo decidí venir a esta fiesta lo que menos pensaba hacer era estar en el auto de Naoya, arriba de él y medio desnuda.

Por mi mente pasaban tantas posibles respuestas para lo que estaba haciendo.

Quería culpar al alcohol, decir que eso era el causante de que me encontrara en esta situación pero en el fondo sabía que lo único que quería lograr era borrarlo de mi mente, aunque sea por un rato.

—Sigues tan hermosa como antes —eché mi cuerpo hacia atrás con cuidado de no apretar el claxon del volante.

Que mi vestido solo se ate al cuello y tenga copa incluida fue lo que le facilitó a Naoya el desvestirme de la mitad de arriba. El vestido ahora se encontraba enrollado en mi cintura y lo que menos me importaba era que se arrugara.

Los labios de Naoya bajaron de mi clavícula a mis pechos. Su hábil lengua lamió uno de mis pezones mientras que con la mano libre masajeaba mi otro seno.

—Deseaba tenerte así desde que llegaste.

Abrí los ojos al escuchar su confesión.

—¿Lo dices en serio?

Se separó de mis pechos para alzar la mirada y verme.

—Pensé que mis intenciones contigo te habían sido claras desde un principio.

—No soy de captar las cosas rápido —contesté.

—Ya veo —acarició mi brazo. —¿Te acuerdas cuando nos escapabamos en nuestras clases libres de la Universidad? —besó mi cuello. —¿Y lo terminabamos haciendo en mi auto?

—Lo recuerdo —susurré.

—Y ahora estamos aquí, reviviendo viejos tiempos —rió levemente.

Tomó mi rostro y me besó con intensidad, pasé mis manos por su cabello despeinandolo un poco y gemí en sus labios cuando sentí como apretaba uno de mis senos.

Seguí besándolo mientras sus manos tocaban cada parte de mi cuerpo.

Esto se sentía muy bien y a la vez sentía que estaba haciendo mal.

Naoya me atraía: sí, pero el sentimiento de culpa me estaba ganando.

Ese remordimiento que se hacía presente no era normal.

¿Por qué las personas usan a otras personas como vía de escape?

La pregunta rondó por mi cabeza y es ahí cuando caí en cuenta que estaba utilizando a alguien para olvidar al imbécil que me había usado de reemplazo.

Me separé de los labios de él.

—Naoya, espera —susurré. —Esto, no es correcto.

—¿Qué pasa? —me miró confundido.

—Yo... No puedo... Yo... —mi teléfono celular comenzó a sonar, lo había dejado en mi pequeño bolso el cual había puesto en el asiento del copiloto. —Mi teléfono —comenté. —Debo contestar.

—Pero Shiori...

Con prisa volví a atar mi vestido y tomé mi bolso para bajar de sus piernas y de su auto. Mi celular no dejaba de sonar, quién me estuviera llamando lo hacía con mucha urgencia.

—Debo contestar, espérame aquí por favor —cerré su puerta y saqué mi celular.

Me alejé varios metros del auto para tener privacidad en la llamada. Llamada que me había servido de pretexto.

Scary Love  |  ChosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora