Ramen de cerdo

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Advertencia: depresión y pensamientos intrusivos.



A veces simplemente pensaba en abandonarlo todo e irse. Para siempre. No regresar.

Afuera estaba lloviendo, había sido otro mal día. Las luces del edificio habían fallado, sus hermanos no estaban en casa, Shen Jiu se encontraba trabajando en el hospital, Shen Ying dijo que tenía un trabajo para hacer en casa de Lan Zhan, él suponía que era una cita, Shen Lian había ido a jugar a casa de Mu Qing junto a Feng Xing, se quedaría a dormir ahí. Él había regresado temprano del trabajo, no podía llamar a Binghe porque también estaba en el trabajo, tampoco quería hablar con Avión, quizás estaba ocupado con MoBei... no quería molestar a nadie. 

Era simplemente otro mal día. Solo estaba de mal humor de nuevo... pronto cuando sus hermanos llegaran a casa se le pasaría, decidió comer algo, tomó un ramen instantáneo de la alacena y puso a calentar el agua en la estufa de gas, tomó algo del lomo de cerdo que había quedado de la cena de la noche pasada, pico algo de cebolla verde y tomo el picante que estaba en el último estante para evitar que su hermano menor abusara de su uso junto a la botella casi vacía de salsa soya. Debía ponerlo en la lista para ir al supermercado. Puso un podcast de asesinos que había descargado unos días atrás para que lo acompañara en la solitaria y oscura casa, se puso los audífonos y guardó su teléfono en el bolsillo de su chaqueta, la calefacción tampoco funcionaba. 

A veces se preguntaba si habría alguien que lo extrañaría si un día decidiera saltar por la ventana. Se rió de sí mismo, causaría un problema si decidiera saltar por la ventana en esos momentos, era bastante desagradable. Sus hermanos definitivamente lo extrañarían ¿cierto? eran sus hermanos, también Binghe... definitivamente lo extrañaría ¿cierto? Binghe era popular, encontraría a alguien más rápidamente, sus hermanos también eran fuertes, lo superarían en un año, Jiu-ge tenía ahora a Qi-ge, se casarían pronto... no sabía aún si Qi-ge y Jiu-ge se mudarían de casa o si vivirían todos juntos... ¿debía mudarse? Quizás sería raro vivir con tu hermano recién casado a sus veintitantos, aunque sus hermanos se quedarían con Qi-ge y Jiu-ge.

Se ponía excusas tontas para no irse. Estaban esos animes que prometían una siguiente temporada que quería ver. Oh... también estaba esa película que se estrenaba el otro año. O la continuación de su manga favorito... o esa nueva serie que había comenzado a ver el otro día. También venían los especiales de esa serie o... 

Sólo eran excusas. 

Sirvió el agua en el vaso del ramen instantáneo, estaba oscuro y era un día de invierno, volvió a encender la estufa para poner un poco más de agua para preparar té o café. Se sentó en la mesa de la sala, no había luz, así que no había nada que pudiera ver en la televisión y no tenía internet suficiente como para ver algo en su teléfono, solo le quedaba comer escuchando el podcast en la oscuridad. Miró la ventana frente a él, la lluvia caía, de vez en cuando la habitación era iluminada por un rayo. Miró su teléfono, había llegado un mensaje de su hermano diciendo que llegaría tarde porque había surgido una emergencia, Shen Ying también había enviado un mensaje diciendo que se quedaría a dormir con Lan Zhan, rió... quería recordarle a su hermano que no olvidará usar protección, pero no tenía ánimos para responder el mensaje. Al parecer se quedaría solo por un par de horas más. 

Odiaba que no hubiera luz, odiaba el silencio. 

El ruido de sus hermanos, A-Ying discutiendo con A-Lian porque el mayor había robado sus panqueques. Jiu-ge discutiendo porque no encontraba su uniforme quirúrgico o porque no encontraba su identificación del hospital. Qi-ge estaría preparando el desayuno, a veces tarareando una canción o con algo puesto en la televisión, la última vez estaban volviendo a ver la primera temporada de Sherlock. Él llevaría a sus hermanos a la escuela, saludaría a Binghe frente a la escuela de A-Lian y ambos caminarían de regreso al metro para dirigirse a sus respectivos trabajos. 

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