-𝐒𝐎𝐒 𝐔𝐍𝐀 𝐏𝐄𝐋𝐎𝐓𝐔𝐃𝐀-𝐦𝐢𝐥𝐨 𝐣

015 -ᒪᒪᑌᐯIᗩ

Sí, me enamoré. Y supe que me enamoré cuando te miraba a los ojos y sonreía, cuando te miraba y me ponía nerviosa, cuando solo con pensarte me hacías sonreír, y cualquier tiempo alado para mí era lo mejor, sí, me enamoré de vos desde el instante en el que te vi, tal vez por eso te odiaba tanto, te odiaba con la mente porque mi corazón te amaba, pero te sigue amando, te ama tanto y que podría pasar cada segundo con vos y nunca cansarse. Eres una de las cosas más increíbles que me pudo haber pasado. Gracias por llegar a salvarme. Gracias por amarme como yo te amo.

-la autora

1 de septiembre del 2022

Martu

Amo sentir tu piel, y más ahora que estoy encima de ti besándote. Esos besos no son de deseo, son de amor verdadero. Podía estar toda mi vida besándote, y hoy no fue la excepción. Estábamos Camilo y yo besándonos en mi cama, nadie sabe de lo nuestro y tampoco quiero que alguien sepa. El pelotudo de Lucas va armar un bardo que ni te cuento.

Estábamos chapandonos hasta que escuche como intentan abrir la puerta de mi pieza.

-Seguro es mi viejo.-dije un poco asustada bajándome de él.

-Qué mierda hago?-preguntó, se podía notar un poco su nerviosismo.

-Escondete en el placart.-respondí mientras lo empujaba adentro. Seguro si mi papá nos encontraba en ese estado me mataba. Aparte de que yo estaba en mi pijama, que mi pijama es un top de tirantes gris con unos shorts de tiro bajo super chiquitos.

-Mirti, qué mierda haces? Abríme.-escuche como mi papá intentaba abrir la puerta desesperadamente. En cuanto se escondió Camilo fui directo a abrirle a mi papá.

-Qué estabas haciendo? A ver tus muñecas. Enséñamelas!-dijo asustado mientras agarraba mis brazos para verlos.

-Tranqui papá, te prometí que nunca lo iba a hacer de nuevo.-respondí para tratar de calmarlo.

-Perdón, es que tengo miedo de que algo te pueda pasar.-dijo mientras me abrazaba.

-Esta bien, es mi culpa.-dije respondiéndole el abrazo.

-Bueno, me quedo en horas extras en el laburo, dormite temprano, que ya es tarde, son las 9:00.-dijo en cuanto se separo de mí.

-Esta bien pa, gracias por avisarme.- le agradecí mientras salía por mi puerta

...

La verdad mi viejo nos había cortado en mambo a Camilo y a mí, pero eso no evito que sigamos disfrutando de la casa sola que tenía.

-Ahora que hacemos?-preguntó Camilo viéndome a los ojos.

-Queres salir?-respondí con una sonrisa.

-Martu, esta lloviendo

-Así mejor.-dije mientras lo jalaba de la muñeca para sacarlo de la casa.

-No, aparte mira como estas, te vas a enfermas.-dijo en cuanto salimos de la casa.

-No importa.-empecé a correr sin soltarlo de la muñeca.

-Toma.-dijo parándose para ponerme su campera.

-Gracias.-respondí a su acción dandole un piquito.

-Listo, ya estamos afuera.

-Queres bailar? Como en mis quinces.-propuse emocionada. Entonces me acerco más a él y poso su mano en mi cintura y empezamos a bailar abajo de la lluvia como si de una pista de baile se tratase.