Una Llamada de Urgencia

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Mientras tanto, en casa de Vicky

Vicky regresó agotada a su casa después de una noche de vigilancia en el cementerio de Springbrook. Había tenido éxito en eliminar a dos demonios, pero la lucha había dejado sus energías agotadas. Anhelando la comodidad de su hogar, se dirigió directamente al baño para tomar una ducha.

El agua caliente que se deslizaba por su cuerpo, la hizo sentir reconfortada. Pero, su momento de relajación se vio interrumpido por el sonido insistente del teléfono en la sala de estar. Su madre, Amelia, se adelantó y contestó, llamándola desde la puerta del baño.

—¡Hija, teléfono! Es el padre de Michael.

Vicky, con una mezcla de sorpresa y preocupación, apagó el agua de la ducha rápidamente, se secó y se envolvió en una bata antes de contestar el teléfono. Gabriel Saint, la saludó con urgencia en su voz.

—Buenas noches, Vicky. Disculpa que te moleste a estas horas, quería saber si Michael está contigo. He llamado al departamento y no contesta, tampoco su celular. Hablé con Claire, pero no tiene noticias.

Vicky frunció el ceño, preocupada. Era extraño que Michael no contestara ni a su padre ni a Claire.

—Disculpe Gabriel, tampoco sé dónde está Michael. Se suponía que me esperaría en la escuela, pero parece que se fue antes. Voy a tratar de comunicarme con Brandon, tal vez esté con él.

—Por favor, Vicky, te pido que te mantengas en contacto y me informes si tienes alguna noticia. Estoy muy preocupado.

—No se preocupe, Gabriel. Lo llamaré tan pronto sepa algo.

—Si no tengo noticias pronto, movilizaré a mis hombres.

EL SECUESTRO DE MICHAELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora