Salí a la sala donde todos estaban sentados en silencio, mi abuelo permanecía de pie al igual que sus guardaespaldas.
-Angelo.- mi abuelo comenzó a hablar.-Te quedarás con mi nieta Hatsumi, ella te explicará luego la situación.- ahora me miró.-Nieta, piensa bien en lo que hablamos. Te quiero ver haciendo mi trabajo en un futuro.- mis padres se alborotaron y se dirigieron a nosotros.
-¡¿De qué habla, suegro?!- mi padre estaba histérico.
-¡¿Qué dices padre?!- mi madre me tomó por el antebrazo y me alejó de él. -Ni creas que dejaré que mi hija entre en ese.....- hizo silencio al darse cuenta que todos mis amigos estaban ahí. Satoru tenía conocimiento de la situación de mi familia, pero los demás no.-Hablaremos... en privado, te espero papá.- me soltó y salió de la casa con mi padre.
-Angelo estará aquí mañana, antes lo necesito para algo.- dijo para luego salir de mí casa siguiendo a mis padres. Observé a los que quedamos y todos estaban realmente espantados.
-Chicos..... de verdad.... siento mucho todo esto.- me acerqué a cada uno. Abracé y acaricié todos, estaba muy molesta de que mi abuelo haya golpeado a los chicos.
-Demonios.... jamás pensé recibir un golpe del señor Damiano.- dijo Gojo aún sobando su mejilla.-Y eso no fue lo peor....yo....lo decepcione.- la mirada que me dió me lastimó el alma.
-Ayyyy Gojooo, esto no fue culpa de nadie...no te sientas mal, por favor.-
-Oye.- escuché a Naoya quejarse, en su mirada se notaba que estaba celoso de que estuviese cerca de Satoru. Me dirigí a Naoya, senté a su lado y lo apapaché con fuerza.
-Ayyyy mi vida.- le susurré.-Perdón por todo esto.- deposité un tierno beso en su mejilla y sentí que se calmó un poco.
-Juro que ese viejo me las va a pagar y tu me vas a explicar todo.- él estaba furioso.
-Amiga, deberías decirnos que onda con tu abuelo, o sea, creo que me hice en la falda del maldito susto que me llevé.- habló Nobara con un poco de nervios.
-Sí amiga, yo reconozco que los Zen'in son unos locos, lo admito porque tanto Naoya, Meg y yo hemos vivido cosas parecidas a esta...pero créeme, me aterró tu abuelo como no tienes idea, se ve diabólico.- jamás había visto a Maki tan asustada. Ella siempre era muy fuerte y cosas extremas en relación a armas y eso no le sorprendían.
-Me iba a matar.- habló Megumi, todos los miramos.-Lo pudo haber hecho.-
-¡MEGUMI!- le llamé la atención.-¡Retractate de lo que acabas de decir!- lo regañe, él no levantaba su mirada del suelo...una mirada perdida y muy triste.
-¿Por qué debería hacerlo?- todos lo rodeamos a excepción de Naoya.
-Oye... amigo... tranquilo.- habló Yuuji.-No digas esa clase de cosas.... nosotros no sabríamos que hacer si te pasara algo....eres muy importante para nosotros.-
-Así es Meg.- me agaché.-Eres importante para mí, por favor... no te sientas mal por nada te lo ruego.-
-¡¿Acaso no lo escucharon?!- se comenzó a alterar, sus ojos estaban cristalizados y me observaba.-La maldición de ese bastardo que se hacía llamar padre, me sigue.- se llevó las manos a su rostro para cubrirlo.-¡Me parezco a ese maldito!-
-¡Ya basta!- le regañe, ya estaba harta.-¡Te diré algo y espero que me escuches muy bien Megumi, olvídate de tu padre, olvídate de lo que me hizo, ya basta.... me tienes cada vez más desesperada porque no sé como tratarte.... pareciera que el secuestrado fuiste tu, por Dios!- me desahogue.-¡Ya he aliviado un poco lo que estaba sintiendo pero te necesito aquí conmigo para así sanar partes que me quedan, por favor, ya basta por un demonio!- Megumi me miró con asombro ante mi desahogue.
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Paradise (Naoya Zen'in)
FanficEl amor puede hacer que las personas cambien para bien o para mal. En el caso de Naoya Zen'in al conocer a Hatsumi Hirawa, ese hombre inmaduro, machista, narcisista y odioso fue cambiado a un mejor ser por una mujer que le hizo sentir el verdadero...