Aarón volverá con nosotros a la cuidad, dice que detesta el pueblo y no quiere estar un segundo más aquí, y lo entiendo...ninguno de nosotros queremos estar aquí.
—Puedes quedarte en nuestra casa el tiempo que sea necesario.—Exclama Camilo.
—No quiero ser una molestia para ustedes.—Exclama Aarón ante las palabras de mi hermano.
—No serías ninguna molestia...Alejó y yo trabajamos todo el día, así que serás la compañía de megmeg.—Exclama Camí.
—Bien...pero prometo buscar algun lugar donde quedarme despues.—Dice Aarón.
—Bueno vámonos ya.—Exclama Bill cerrando el maletero de la ban.
...
Después de un largo...muy largo camino, porfin habíamos llegado a casa, nos encontramos bajando las maletas de la ban, en eso un audi color negro se estaciona atrás de nosotros.
—Mierda...—Murmura Bill.
Yo lo miro extrañada y confusa.
Vuelvo aver el auto, viendo cómo la puerta de piloto se abría lentamente, de allí se baja Tom...mi Tom.
Traía una bandana en la frente, un pantalón holgado color negro, una sudadera de Nike color blanco, igual que sus tenis.
Tom mira a cada uno de los chicos y luego posa sus ojos en mi...ladea su cabeza y sonríe.
Lentamente se acerca a mi, pero alejó se pone enfrente de mi, impidiendo que Tom pudiera acercarse más.
—Que haces aquí.—Pregunta mi hermano con un tono grueso.
—Vengo a ver a mi novia, algún problema con eso.—Responde.
—Sus ojos volvieron a la normalidad.—Susurra Gus a mi oído.
Y es cierto, sus ojos son color cafe claro, con ese toque de brillo en ellos.
—Hace unos días no querías verla, porque ahora sí.—Pregunta Bill a su hermano.
—Mm...no se.—Murmura.—Ni siquiera sé de qué hablan, como que hace días, si ayer estuve con ella en la casa de nuestra abuela, ya lo olvidaron.—Exclama, todos nos miramos entre si.
—Tom eso fue hace cuatro días.—Exclama georg.
—Claro que no...fue ayer, mira.—Saca su teléfono del bolsillo.—Pero q- como que cuatro días, pero si fue ayer.—Apaga su teléfono.
—Hay algo mal aquí...—Susurra Camí.
—Ya dame permiso.—Rodea alejó y nuevamente camina hacia mi, trago saliva bruscamente, al llegar a mi se inclina hacia delante y besa mi mejilla.—Como estás princesa.—Dice.
—B-bien...—Tartamudeo.
—Que tienes nena.—Pregunta acariciando mi mejilla.
—Mm...nada, solo que me pone muy feliz verte.—Exclamo, el sonríe, se acerca a mi y comienza a besar mis labios.
Pero en eso siento como de repente se detiene, lo tomo de los hombros y lo alejo de mi, viendo cómo el miraba un punto fijo, segundos después callo al suelo.
...
Tom.
Lentamente abro mis ojos, no siento mi cuerpo, mi cabeza duele inmensamente.
Me encuentro acostado en un sofá...en el sofá de mi novia.
No recuerdo nada...mi mente está en blanco, mis manos sudan, y siento mi cuello frío.
—Ya despertó.—Escucho una voz familiar a un lado mío, lentamente volteo mi cabeza, viendo a georg, el se acerca a mi y pone un trapo en mi frente, un trapo súper frío.
—Que me paso...—Murmuro intentando levantarme, pero me fue imposible hacerlo yo solo.
—Te desmayaste.—Responde mi hermano acercandose a mi.
—D-donde está m-meg.—Pregunto.
—Aqui estoy.—Escucho la voz de mi hermosa novia acercandose a mi.
Lentamente volteo, viendo a mi novia acercarse a mi, se sienta a un lado mío y agarra mi mano.
—Como estás.—Pregunta.
—Tengo la mente en blanco no recuerdo nada...y eso me preocupa.—Respondo, ellos se miran entre si.
—Tenemos que contarle lo que pasó.—Exclama un chico, el cual no conozco.
—Y tu quien eres.—Pregunto.
—Mucho gusto soy Aarón...yo fui quien ayudó a encontrará la bruja que no es bruja.—Responde, yo fruncí el ceño.
—No entiendo...que paso.—Vuelvo a preguntar.
—Te acuerdas de alba, verdad.—Pregunta mi novia, yo asiento lentamente.
—Sisisi, la insoportable que mantiene jodiendo día y noche.—Respondo.
—Bueno pues ella te hizo una brujería.—Exclama Bill mirando su teléfono.
—¿!QUE!?—Me levantó del sofá, cayendo al suelo.
...
Después de una larga historia, sigo sin entender.
—Bueno...la cosa esque ella de maldijo o hechizo, nosotros viajamos cuatro horas para encontrar la cura, la doña digo que Meg tendría que besarte, y si tú enverdad la amas el hechizo o maleficio se rompería, y al parecer si paso, porque cuando se besaron tu caiste al piso, y ahora dices que no recuerdas nada.—Exclama georg.
—Ya entiendo...creo.—Murmuro.
—Bueno...mucho gusto soy Aarón, y amo hacer amigos.—Exclama el rubio extendiendome su mano.
—Mucho gusto...yo soy Tom.—Estrecho mi mano con la de el.
—Que bueno es tenerte de nuevo.—Exclama mi novia recostando su cabeza en mi pecho.
—Lamento mucho todo lo que te dije...pero ese no era yo.—Exclamo acariciando su cabeza.
—Lo se...—Conectamos miradas.—Te amo demasiado.—Dice, yo sonrió.
—Yo tambien te amo mi amor.—Digo.
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Aquí no termina la tormenta, se vienen lo peor para el próximo capítulo.
