Soy Harry Potter

Capítulo 16: Vacaciones en Francia

"No me gusta."

Daniel Granger daba vueltas en su habitación, siendo visto en silencio por su esposa, Emma Granger.

"¿Qué no te gusta?" Preguntó Emma. "¿El hecho de que Hermione tenga novio? ¿O el hecho de que lo trajera a casa y, básicamente, nos mintiera?"

"¡Ambas!" Respondió Dan en voz alta. "¡Es muy joven para tener novio! ¡Y nos mintió diciendo que era un amigo! ¡Seguramente ese pequeño demonio ha malinfluenciado a mi princesa! ¡Ella nunca nos habría mentido!"

Emma miró en silencio a Dan, sabiendo que su esposo no detendría su perorata hasta que estuviera satisfecho.

"¡Deberíamos enviarlo directo a casa!" Estalló Dan.

"Dan, aceptamos tenerlo en casa y llevarlo con nosotros." Le recordó Emma. "Y no tiene dónde quedarse, recuerda."

"¿Y si nos mintió sobre eso?" Preguntó Dan.

"No creo. Aparte de decirnos que solo era un amigo, Hermione nos dijo la verdad en todo lo demás." Argumentó Emma.

"Pero... Pero mi princesa es solo una niña... "

"Y Harry también es un niño. Seguramente es algo de niños, podrían olvidarlo con el tiempo."

"¿Tu crees?" Dan miró esperanzado a su esposa.

"Podría ser." Asintió Emma, alegrando a su esposo. "O podría ser que de verdad se quieran así y terminen estando juntos hasta ser adultos." Añadió por pura diversión, disfrutando de la expresión mortificada de su marido.

"¡Eso nunca! ¡Si quiere a mi princesa deberá pasar por encima de mi!" Gritó Dan.

"Es un mago, posiblemente podría hacerte volar con un movimiento de varita." Se burló Emma.

"No me importa, si es por mi princesa, ¡Enfrentaré a magos, niños demonios y hasta dioses!" Declaró Dan apasionadamente.

"Eres muy dramático, Dan." Emma sonrió burlonamente.

Mientras los mayores Granger hablaban en su habitación, Harry y Hermione estaban en la habitación de esta última.

Harry se encontraba sentado en la cama, mientras Hermione estaba enfrente suyo y trataba de mantener sus nervios a raya.

"¿Crees que tus padres estén bien?" Preguntó Harry nerviosamente.

"Lo están, y tranquilo, seguramente están tomando esto de la mejor forma." Tranquilizó Hermione.

"Siempre soy quien debe ayudarte a relajarte, ¿Porque los roles se invirtieron tan repentinamente?" Harry gimió nervioso mientras se llevaba las manos al rostro.

"No te preocupes por eso, ya verás que todo va a estar bien."

Hermione se sentó junto a Harry y lo abrazó con fuerza, transmitiendole la calma y seguridad que necesitaba sentir.

"Si, seguro que lo estará... " Susurró Harry, con una pequeña sonrisa.

Fuera de la habitación, viendo todo a través de una rendija en la puerta entreabierta, estaban los padres Granger, mirando atentamente a la pequeña pareja.

"Son muy dulces juntos." Emma sonrió enternecida.

"Pero mi pequeña... " Dan aún parecía inseguro.

"Dan, esto habría pasado más temprano que tarde, así que debes aprender a lidiar con esto." Dijo Emma.

"¿Y si la lastima?" Preguntó Dan.

"No creo que eso pase, pero si se da el caso, entonces estaremos ahí para nuestra hija."

Dan miró nuevamente a través de la rendija y vió a Hermione mostrándole a Harry su gran colección de libros.