Soy Harry Potter

Capítulo 6: Compras en el Callejón Diagon

"¡Harry!"

Harry sonrió cuando, al abrir la puerta, unos enormes brazos lo atraparon y abrazaron con una fuerza monstruosa.

"También me da mucho gusto verte, Hagrid." Dijo Harry, usando sus diminutos y delgados brazos para abrazar el brazo del semigigante.

"¿Me recuerdas?" Masculló Hagrid, sorprendido.

"Es una larga historia, pero si, te recuerdo." Dijo Harry. "Al igual que muchas cosas del Mundo Mágico."

Hagrid sonrió más ampliamente mientras Harry no podía evitar pensar en que el hombre era demasiado inocente y amable para ser real.

"¿Supongo que viniste a llevarme al Callejón Diagon?" Dijo Harry, a sabiendas de las órdenes de Dumbledore al semigigante.

"Así es." Asintió Hagrid, inflando el pecho orgullosamente.

"Entonces, ¿Qué esperamos? Es hora de irnos." Dijo Harry, tomando una sudadera del perchero junto a la puerta y colocándosela.

Juntos, adulto y niño, caminaron hasta llegar a la estación de trenes y tomaron el que los llevaría a Hogwarts.

"¿Qué tal ha sido vivir con los Dursley? Escuché que no eran personas muy agradables." Dijo Hagrid.

"Bueno, si que son malos, pero he podido lidiar con ellos." Respondió Harry. "¿Y qué tal tu trabajo como Guardabosques? ¿Ha pasado algo interesante en Hogwarts o el Bosque Prohibido?"

"Nada realmente importante, aunque el mes pasado logré hacerme amigo de algunos Hipogrifos." Dijo Hagrid, sonriendo ampliamente por el interés mostrado por Harry hacia su trabajo y hobby. "¡Uno de ellos incluso me permitió nombrarlo!"

Rápidamente la mente de Harry unió puntos y llegó a una conclusión.

"Déjame adivinar, lo nombraste Buckbeak." Dijo Harry.

"Si, ¿Cómo supiste?" Preguntó Hagrid, asombrado y confundido.

"Intuición." Respondió Harry, con un encogimiento de hombros.

Mientras el tren seguía moviéndose, Hagrid siguió contando a Harry todo acerca del Bosque Prohibido y las bestias que ahí habitaban.

Al llegar a Londres, Harry subió a la espalda de Hagrid y se sentó sobre sus hombros, aprovechando la oportunidad para descansar y evitar el contingente de gente que se empujaban mientras caminaban.

"Según recuerdo el Callejón Diagon está en Charing Cross Road, ¿No?" Dijo Harry, aparentando ignorancia.

"Bueno... En realidad no sé los nombres de las calles muggles, solamente sé cómo llegar." Respondió Hagrid, divirtiendo a Harry. "Lo que si sé es que la entrada al Callejón está en el Caldero Chorreante."

"Oh, por cierto, hablando de eso... Hagrid, ¿Podrías cubrirme un segundo?" Pidió Harry.

Hagrid se confundió por la petición de Harry, pero a pesar de eso asintió y lo cubrió con uno de los bordes de su enorme abrigo, cuando devolvió la prenda a su lugar vió que Harry había cambiado.

Su cabello aún estaba algo alborotado, aunque era obvio que estaba ligeramente peinado, sus ojos ahora eran el derecho de su mismo color esmeralda y el izquierdo de color marrón. La legendaria cicatriz en forma de rayo había desaparecido de su frente.

"Harry... ¿Qué... ?" Hagrid masculló atónito.

"Soy un Metamorphmagus, recuerda que mi bisabuela es Dorea Potter, nacida Black, tengo la suficiente sangre Black para heredar su rara habilidad familiar." Explicó Harry. "Hago esto para pasar desapercibido, así que te pido que me llames James, ahora mismo soy James Evans."