Así pasó, un día cualquiera de mes de mayo la profesora ordenó hacer grupos de 5 estudiantes para dar unos libros de los que teníamos que leer y transcribir unas preguntas, quién mejor para el trabajo de líder, yo (ok, actualmente soy una perfeccionista enfermiza y por eso me gusta hacer todo sola), así que empecé a dictar las preguntas para luego leer, siempre era el mismo mecanismo, yo dictaba y ellos escuchaban porque eso ERA lo que habíamos propuesto TODOS.
Aunque todo iba bien, no pude explicar porqué Frank no escribía, tal vez no quería. Continuando, teníamos la regla que sí te quedabas en el dictado dejabas el espacio porque después todo el grupo se atrasaba, pero yo como toda una chica romántica quise ayudarlo.
-¿Por dónde te quedaste?- pregunté.
Frank simplemente no respondió, no quiso recibir mi ayuda, su única solución fue arrebatarme el maldito libro. Ahora la que estaba atrasada en el dictado era YO, y obvio me quejé, pero nadie me escuchó porque después también se atrasaban ellos (o tal vez le temían a Gerald) y yo al ver sus reacciones a diferencia de él, preferí irme del grupo y colocarme al día con la lectura en otro grupo menos egoísta. Y así fue, Marge me recibió con los brazos abiertos y pude escribir lo que me faltaba.
Tal vez el problema pudo acabar ahí, pero en vez de eso Frank quiso seguir, le dijo a la profesora que me había cambiado de grupo y no se podía hacer grupos de 6, así que me vi obligada en regresar, y se volvió a repetir la historia.
-Me atrasé, ¿podrías repetir?- sugerí- sino me voy.
-No te puedes ir, tu grupo está acá- dijo Frank.
-¡NO VES QUE ESTOY ATRASADA Y NO HACES EL ESFUERZO DE REPETIRME!- alcé el tono y fruncí demasiado el ceño.
Y siendo sincera yo nunca fui linda, tal vez teniendo 3 años porque eres como una bebé andante, pero nunca más, mi mala costumbre de atarme el cabello con una trenza me hizo la frente más grande y tenía las cejas gruesas, y ya se pueden imaginar como me veía en ese momento con el ceño MUY fruncido.
Frank hizo lo más "normal" que iba a hacer durante toda su vida.
Así es, burlarse de mí.
Tal vez la mayoría haya sido víctima o ha presenciado de la burla de alguien que utilizan apodos que para nada son "graciosos" (o al menos para la persona a la que van dirigidas) y está bien, está bien si esa persona también se ríe; aunque se debe tener en cuenta que se puede estar riendo por dos motivos: presión o humor. Y yo claramente no reaccioné de esa manera, sus palabras verdaderamente me hirieron, Y más sabiendo que salían del chico que me gustaba, solamente lloré....lloré y lloré. Algo que nunca había hecho frente a la gente, me caracterizaba por siempre reír o tener buena actitud, pero ¿saben? se sintió horrible, y es algo que aunque actualmente se haya superado, sigue ahí, ese miedo sigue ahí, porque NO es gracioso, es una inseguridad que pocos se atreven a mostrar libremente ante el mundo y sus opiniones. Yo...ya no quería ser así, quería esconder eso, porque no me dolía que cualquiera me lo dijera, pero ¿él?, no fue cualquiera, él sólo fue Gerald Frank, el chico que me gustó durante 7 jodidos años.
Y eso no fue todo, para mi sorpresa y la de muchos claro, verme llorar no era algo normal, así que se lo notificaron a la profesora, claro que me llamó, me preguntó que había pasado y le dije TODO, llamó a Frank y le preguntó si aquello era verdad (¿Qué mierda le pasaba a la profesora por la cabeza? obviamente estaba claro, con pruebas más que suficientes para un regaño, pero no).
Frank lo negó todo.
...
Llegué a mi casa esa tarde y solo podía resonar en mi cabeza eso ¿acaso no podía parar? en ese momento solo deseaba que sus palabras desaparecieran de mi cabeza, o que al menos nunca las hubiera dicho, o que las hubiera dicho pero no frente a mi. Algo que era imposible porque ya estaba hecho, ¿no? pero no evitaba las secuelas que eso ocasionaría, era una niña de 8 años que había sido humillada de la peor manera y que en el fondo tenía rabia por su NEGACIÓN, ¡LO HABÍA NEGADO TODO Y LA PROFESORA LE CREYÓ! esa impotencia inundó mi pequeño cuerpo, esas ganas de haber tenido cámaras para que no pudiera negar NADA, pero otra vez, era imposible.
Esa misma noche había borrado a Frank de mi lista. Ya no quería saber nada de él, de su olor, de su presencia, de su voz, nada. Con eso en mente pude seguir adelante, seguía teniendo amigos, sí, pero enamorarme....no.
Ese año conocí a James...y a Nick.
- - -
(Presente)
James entró con su frente en alto (aunque haya llegado tarde), lo cual lo hizo ver más atractivo; seamos conscientes que habían pasado 2 años sin ver a James ¿ok? es normal quedárselo viendo como si fuera un modelo profesional y reconocido en muchos países pero como vives debajo de una piedra nunca supiste de la existencia de este y cuando lo conoces quedas en un estado de estupor; porque sí, así estaba yo, pasmada y maravillada, les juro que si aún me gustara James hubiera hecho lo imposible para hacerlo mío, pero como no era así, tenía que dejar de decir cosas así y más con recordar el por qué me dejó de gustar hizo más débil la aparición de esas estúpidas apotegmas.
Sentí el peligro, el profesor estaba escaneando por completo el salón para ubicar a James así que quise actuar más rápido y escanearlo al doble de velocidad para prevenir mis presentimientos. Miré a mi derecha, estaba Jani, a mi izquierda estaba Diana, en frente mío estaba Isabella, y delante de ella estaba Audrey, ya solo me faltaba girar detrás mío pero antes de mirar me sorprendió a quién tenía detrás.
Era Frank, ese animal zarrapastroso se dio cuenta de mi asombro, entornó su sonrisa y levantando su comisura izquierda se levantó, me heló lo que le dijo al profesor.
-Profe, aquí hay un puesto desocupado- Y sin más, se fue a sentar detrás de Andrew que estaba a dos filas de la mía.
¡ESTOY JODIDA! grité en todo mi interior, sabiendo que nadie me escucharía, y así decepcionada regresé a mi posición inicial.
James se acomodó y se limitó a poner su mochila en la silla, para posteriormente sentarse como un puto fuckboy, me di cuenta por la presencia de sus piernas estiradas a los dos costados de mi silla.
Mátenme en serio -es suplica y me harían un gran favor-
No sé que iba de mal en peor, que tuviera a James Turner detrás mío o tener en conjunto las miradas del salón en solo una dirección, a mí. Y creí que no podría empeorar hasta que sentí dos leves golpes en mi hombro derecho, así es, proveniente del brazo del idiota de James.
-¿Qué?- me giré para encararlo.
-¿Por qué tanto miedo con mi presencia?- preguntó.
-¿Miedo?- pregunté entre risas.
-¿De ti?- ahora sí, reí- ¡jamás!- y exploté en carcajadas.
-Eso parece- y se llevó la mano al pecho -Me dolió lo que hiciste.
En ese momento todo aquello sucumbió mi alterada cabecita con nostálgicos recuerdos, así que me preparé para responderle.
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Until We Are Together
RomancePor ahí dicen "donde hubo fuego cenizas quedan" ¿Tendrán razón? ¿Podrá resurgir de las cenizas aquel fuego? ¿Podrá el calor amparar a los corazones sin chispa? Espero lo disfruten.