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"El mayor error del ser humano es intentar sacarse de la cabeza algo que no sale del corazón"
Tras la muerte de Odasaku me comencé a sentir mal, tanto al punto que dejé de comer y Chuuya se daba cuenta de ello. Agradecía que se preocupara por mi pero no quería molestarlo.
Ahora tenía miedo de tener relaciones profundas con las personas, pero para este punto ya tenía un enamoramiento profundo por Chuuya. ¿Cómo borrarlo? Fácil, alejándome de el para que el sentimiento desapareciera.
No sentía ni frió, ni calor, no estaba triste, mucho menos feliz, sentía esa presión en el pecho. Me sentía vacío.. otra vez.
Ese día vague por las calles de Yokohama pensando en su reacción.. "vaya, seguro me odiaría", pensaba yo... que equivocado estaba. Jamás creí que un ser sin corazón pudiera tener dependencia emocional hacia alguien como yo.. una broma de mal gusto.
Se que deje de sentir algo por el ya que en ese tiempo donde no estábamos juntos tuve múltiples aventuras con demasiadas mujeres. Con ello pude olvidarlo, creí que el haría lo mismo pero no. Mientras yo me divertía, el se ahogaba en pétalos de cerezo.
Quizá salió de mi corazón, pero nunca de mi cabeza. Lo pensaba siempre aunque ya no de la misma forma, solo anhelaba no volver a verlo, cosa que no se pudo lograr.
No eran amantes, no eran novios y tal vez no eran amigos. Pero siempre fueron el uno para el otro.
La peor forma de extrañar a alguien, es estar sentado a su lado y saber que nunca lo podrás tener, creo que así pensaba Chuuya.
Todos los días eran, son y serán nublados ante mis ojos, pero siempre que pienso en Chuuya se convierten en los mejores días de mi vida. Haría por el lo que nadie a hecho por mi, pero en serio me duele no poder hacer nada.
Supongo que mi corazón está tan dañado que reprimió todo sentimiento, y ahora que busco ese querer por Chuuya, no logro encontrarlo.
Me fui queriéndome quedar.. quería estar con el pero no debo estarlo, quería hablarle pero ya no debía hacerlo, a veces no por decisión propia, simplemente debía hacerlo para estar bien. Y no es para nada fácil, es complicado. Las ganas de querer volver a la Mafia eran inmensas, pero simplemente no podía.
A veces me gustaría regresar el tiempo, donde éramos desconocidos queriéndose conocer.
Cuando hacía mis bromas de suicidio y veía la expresión en el rostro de Chuuya, por primera vez sentí que ya no debía hacer ese tipo de comentarios.
Por primera vez en la vida entendí que por muy difícil que sea la situación, si una persona te quería en su vida iba a hacer lo posible para que no te fueras de ella.
El amor bonito es querer y procurar al otro. Verlo crecer, verlo progresar, verlo desarrollarse, verlo ser feliz, aunque aveces eso no te incluya a ti.. supongo que ni eso pude darle a Chuuya.
¿De qué me servía ignorarlo si lo pensaba a cada segundo? Lo menos que puedo hacer es esforzarme en tratar de ayudarlo, curarlo y amarlo por el resto de mi vida, ya que la suya jamás terminará naturalmente.
Puedo quererlo, y desear tenerlo, y al mismo tiempo no querer esa vida. Pero estoy seguro que si lo viera en diez años más, mi mente aún lo recordaría, las cosas que le gustan, desde su comida favorita hasta su posición favorita para dormir, absolutamente todo.
Chuuya..
Yo no quería que quedaras en ese estado por mi culpa.
No quería que alguna vez experimentaras el dolor de un corazón roto.
Quisiera regresar el tiempo y jamás haberme ido de la Mafia..
