EPÍLOGO 2

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4 años más tarde...
MARK:
Estamos a punto de llegar a casa, y ambos estamos muy nerviosos. Es la primera vez que tenemos una situación como esta, y no sabemos como reaccionará Ava. Le abro la puerta a Laura, y nos metemos los dos en nuestra casa.
-¡Mamá! ¡Papá! ¿Y mi hermanita?-Dice la vocecita de Ava.
-Estamos aquí cariño, ven, ven a ver a tu hermana pequeña.-Le dice Laura.
-¿A ver?-Dice ya acercándose-Qué guapa mi hermana bebe.
-A que sí-Le digo yo.
-¡Quiero cogerla! ¡Quiero cogerla!-Dice Ava entusiasmada.
-Ve a sentarte en el sofá y te la dejo.-Le dice Laura.
Ava es igual que su madre. Tiene el pelo pelirrojo, largo con un rizo profundo. Los ojos verdes como Laura y es muy delgadita. Le gusta mucho jugar con sus muñecas y cavar en el parque. Se porta muy bien y no suele hacer marranadas cuando hay que dejarla en la guardería.
-Se llama Eire.-Le digo a Ava.
-Eire, Eire, Eire...-Repite ella sin parar.
Laura se sienta con Eire en el sofá. Yo ayudo a Ava a subir al sofá. Se sienta al lado de su madre y dice:
-¡Dame! ¡Dame! ¡Dame!
Laura le da el cuerpo del bebe mientras ella aguanta la cabeza. Saco el móvil y pongo la cámara.
-¡Sonreír!-Les digo.
-¡Ding dong!-Suena la puerta.
-Voy yo-Le digo a Laura.
Abro la puerta y me encuentro a Edna con Max. Les doy un abrazo y los dejo pasar.
-Laura me ha mandado un mensaje y hemos venido para aquí.-Me dice Edna.
-¿Queréis ver a Eire? Está en el salón.-Les digo.
-¡Claro! ¿Si no para qué hemos venido?-Me dice Max.
En cuanto entran en el salón, Ava, que ya no tiene a su hermana encima, sale corriendo hacia Edna. Esta la recibe con los brazos abiertos. Esta vez el abrazo no dura tanto porque también le está esperando otra bebe. Laura está sentada en el sofá, y Edna va a sentarse a su lado. Max hace lo mismo al lado de Edna. Laura se desprende de Eire por unos minutos. Se quedan Edna y Max con Eire en brazos y Ava correteando por ahí.
-Aprovechamos que habéis venido para ir a comprar ¿vale? Que tenemos menos comida que en la guerra.-Les dice Laura.
-Claro, claro-Nos dice Max.
MAX:
Ya se han ido hace unos cinco minutos. Y yo sigo haciendo lo mismo que antes de que se fueran. Preguntaréis el que. Pues mirar descaradamente como Edna coge a su sobrino. Se la ve tan guapa, tan bonita, tan inofensiva... Será la mejor madre de mis hijos. Seguro.
-¿Quieres cogerla un rato?-Me pregunta.
-No, no hace falta. Yo me encargo de Ava.-Le respondo.
-Tú mismo, esto es una maravilla.-Me dice con una sonrisa bien amplia en la cara.
Me río, pero no respondo, prefiero verla disfrutar, me da más placer.
-Ava ven, que nos vamos a hacer una foto-Le digo a la niña que sigue correteando.
Se acerca al sofá y la cojo. Apoyo el móvil en la mesa, pongo el temporizador de la cámara y le doy al botón.
-Sonríe Ava-Le dice Laura.
-Quiero uno de estos Max-Me dice con los ojos llorosos.
-Y yo. Pero ya tendremos tiempo. Ahora hay que viajar, emborracharse, hacer el loco...-Le digo sonando muy poético.
-Es verdad...-Me dice un poco triste.
-Cada día es un regalo Edna, hay que disfrutarlo y darle su tiempo a las cosas.-Le digo.
Ella me abraza y con un suspiro me dice:
-Te amo.




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