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Abrí los ojos y lo único que ví era la luz que asomaba por la ventana de aquel cuarto, yo acurrucado en la cama con una manta gris hasta el cuello volví a cerrar los ojos.

Cuando pensé un poco más, no estaba en mi cama asique me senté, apoyando mi espalda en la pared y eché mi pelo hacia atrás para quitarme el flequillo.

Me froté los ojos un poco y los abrí recordando lo que pasó la noche anterior y procesarlo. Me pregunté el por que estaba en un dormitorio, me levanté y arreglé mi ropa y mi pelo un poco, saliendo al pasillo empiezo a buscar a Changbin.

-¿Changbin?

-Estoy en el comedor, abajo.- Dice desde lejos.

Para mí la casa era un laberinto, pero tras unos segundos localicé las escaleras para bajar, caminé hasta el comedor y me encontré con un olor alucinante de panqueques.

Lo miré subiendo mi cabeza. -No deberías haberte molestado.

Le pregunté dónde estaba el baño, porque al verlo con una toalla en el cuello y darme cuenta de que se había duchado me sentí muy sucio.

Entre al baño y me asee, pensando que no debería haber venido a su casa, por que era muy precipitado.

Cuando terminamos de desayunar sonó un tono de alarma, que suponía que era el mío.

-Creo que es tu móvil, ahora te lo traigo- dice Changbin levantándose formalmente.

-Gracias.- Dije sonriéndole.

La llamada era de Jisung el cual soltó un grito al contestarle la llamada. Me dijo que él y Minho llegarían a la casa en un par de minutos. Cuando colgué la llamada ayudé a Changbin con algunos platos.

Después de una risas y algunas anécdotas entretenidas mientras terminabamos de lavar los platos, el timbre de la entrada se hizo sonar.

-Voy yo, creo que es Minho- Dice yendo hacia la entrada.

Al poner el último plato a secar junto con los demás agradecí no tenerlo en la mano por que una persona muy alegre se acercó a abrazarme por la espalda.

-Felix, buenos días.-Dice Jisung alegremente.

-Holaa- dije algo cansado por lo fuerte que me abrazaba.

-¿Qué tal tu cita?

Me sonroje, lo de anoche ¿se podría denominar cita? Negué con la cabeza aquello era imposible, solo vimos una película porque mi compañero de casa me había abandonado y Changbin se ofreció a invitarme a un par de copas.

-No ha sido una cita

Jisung subió una ceja, incrédulo y me sacudió de los hombros.

-¿Cómo no va a ser una cita? Bueno piensa lo que quieras.-Dijo convencido de tener la razón.

Changbin y Minho entraron a la cocina.

-Buenos días.- Salude a Minho con una sonrisa.

Los dos nos ofrecieron salir esta noche a un concierto que había en la ciudad, aceptamos ya que era fin de semana.

Jisung y yo volvemos a casa para comer algo y prepararnos. Me senté en el sofá y puse un documental de animales, y comencé a comer mis noodles recién preparados.

Para salir esta noche me puse un conjunto de pantalón corto y camiseta de color beige con unas gafas de sol, aunque se acercaba el invierno seguía haciendo calor.

Jisung llevaba algo similar pero de color verde pistacho y una gorra de colos similar "Yo y Minho vamos a ir conjuntados" Me dijo antes de cambiarse, no los había visto muy melosos pero, con la actitud de Jisung hablando de su pareja me lo parecían, como niños chicos emocionados por vestir iguales.

En traje. Changlix.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora