Volviendo a empezar - El Amor Invencible

Capítulo 41: Boda de ensueño

PoV Gael:

Gael se despertó con la suave luz del amanecer filtrándose por las cortinas de la habitación. Antes de que pudiera orientarse por completo, la puerta se abrió de par en par, revelando la energía desbordante de Benja y Oliver. Sus rostros irradiaban entusiasmo, y Gael no pudo evitar sonreír ante su contagioso fervor por la boda.

Matías y el Tío Apolo, quienes habían llevado a los jóvenes a desayunar para permitirle a Gael descansar un poco más, entraron detrás de ellos. La habitación se llenó con el alboroto emocionado de los chicos, y la atmósfera se cargó de la anticipación de un día especial.

Gael, a pesar de la corta noche, se levantó con renovada energía. El traje de boda colgaba con elegancia en una esquina de la habitación. Era un traje de lino especialmente seleccionado para la ocasión. Tenía una solapa clásica y detalles cuidadosamente elegidos, lo que irradiaba elegancia y estilo. La chaqueta y los pantalones, confeccionados con precisión, se ajustaban a la perfección, creando una imagen impecable.

Cada pieza del conjunto, desde la chaqueta hasta los pantalones y la camisa, estaba llena de significado. Mientras se vestía, Gael podía sentir la gravedad del momento. Cada ajuste, cada gesto al abrocharse los botones representaba una promesa y un compromiso con lo que estaba por venir. El lino, suave al tacto, añadía un toque de frescura y comodidad, perfecto para la ocasión en la playa.

Con reverencia y cuidado, acomodó su collar para que se pudiera ver, era el complemento ideal para tal ocasión, mejor que cualquier corbata, ya que esa pieza significaba tanto para él como para Marena. Así se preparó para encontrarse con su futuro, sintiendo la importancia de cada detalle en su vestimenta. Listo y emocionado, se observó en el espejo, y el reflejo que le devolvió le recordó la importancia de este día.

Gael miró a Benja y Oliver, quienes también estaban impecables en sus trajes de lino. La alegría y el orgullo brillaban en los ojos de Gael al tener a sus hijos a su lado en este momento especial. Cuando Benja y Oliver se unieron a él, la habitación se llenó de risas y bromas, aligerando la atmósfera con la alegría propia de una mañana de bodas.

"Chicos, hoy es un día importante para todos nosotros" -dijo Gael con entusiasmo.

"Yo la verdad estoy emocionado de ver a mamá...debe estar hermosa" -sonrió Benja- "ser quien la entregará me llena de dicha".

Gael asintió, sintiéndose orgulloso de sus hijos y de la conexión especial que compartían en este día significativo.

"Y lo harás increíble" -lo volvió a mirar y luego a Oliver- "Si lucen bastante guapos ambos".

"Pero el que parece galán de película, eres tú papá" -dijo Oliver con su característico toque de humor- "Así que no te pongas nervioso".

"La verdad estoy más emocionado que nervioso. Hoy es un día para la alegría y el amor".

Cuando Matías y el Tío Apolo entraron en la habitación, el entusiasmo alcanzó su punto máximo. Benja y Oliver no podían contener su emoción, y Gael expresó con una sonrisa radiante lo que sentía en su corazón.

"No puedo esperar ver a Mar caminando hacia mí en el altar"-compartió, revelando la ansiedad y la anticipación que llenaban su ser.

Este día, que había imaginado y soñado, finalmente estaba tomando forma, y Gael estaba listo para dar el paso hacia un futuro compartido con Marena.

Gael avanzó con pasos decididos hacia la playa privada donde tendría lugar la ceremonia. Benja y Oliver caminaban a su lado, compartiendo sonrisas y emociones que iban más allá de las palabras. La brisa marina acariciaba sus rostros mientras se dirigían hacia el escenario donde se sellaría su unión con Marena.