Capítulo 42: Amor Invencible bajo la Luna

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PoV Marena:

La camioneta los dejó a la orilla, y la brisa salada del mar anunció la cercanía de su nuevo paraíso. Un yate, elegante y privado, esperaba para llevarlos hacia su destino en la isla privada. Marena podía sentir la emoción palpitar en su pecho mientras subían a bordo y se adentraban en las aguas cristalinas.

El mar les guió hasta la isla, donde la casa frente al mar se erguía majestuosamente. Al acercarse, Marena pudo distinguir los detalles de la arquitectura: una mezcla de elegancia rústica y moderna que se integraba perfectamente con el entorno tropical. Las palmeras saludaban su llegada, sus hojas mecidas por la brisa como un cálido saludo de bienvenida.

La casa, rodeada de exuberante vegetación, revelaba terrazas amplias y ventanas que abrazaban las vistas panorámicas del océano. Mientras caminaban hacia la entrada, Marena no podía evitar sonreír, sintiendo cómo la magia de este lugar especial ya comenzaba a envolverlos.

Al abrir la puerta, una mezcla de fragancias frescas y la suave brisa del mar les dio la bienvenida. El interior estaba decorado con tonos cálidos y detalles náuticos que resaltaban la conexión con el entorno marino. Grandes ventanales permitían que la luz natural inundara cada rincón, creando una atmósfera acogedora y llena de vida.

Mientras exploraban la casa, Gael, con una chispa juguetona en los ojos, decidió tomar a Marena en brazos como si fueran novios recién enamorados. La risa espontánea de Marena resonó en la entrada de su nuevo hogar, llena de alegría y complicidad.

"¿Qué haces, Gael?" -preguntó Marena entre risas, mientras él la levantaba en el aire con facilidad.

"Así es como debí empezar todo, y así empezaremos, como novios frescos y llenos de emociones nuevas" -respondió Gael con una sonrisa traviesa.

"¡No puedo creer que estés haciendo esto!" -exclamó Marena, riendo aún más fuerte mientras él la sostenía en sus brazos.

"Es nuestro refugio de amor, ¿no? Tenemos que empezar con buen pie, o mejor dicho, con buenos brazos" -dijo Gael, haciendo una pausa para agregar más humor a la situación.

Ambos se sumergieron en una risa compartida, disfrutando de ese momento lúdico que añadía un toque de frescura a la entrada a su nueva casa.

Los pasos ligeros de Gael resonaron en el interior mientras llevaba a Marena en sus brazos, y la casa pareció envolverse aún más en una atmósfera de romance.

"¿No pensaste que ya superamos la etapa de los brazos fuertes?" -bromeó Marena, mirándolo con complicidad mientras él la llevaba.

"En el amor, no hay límites para la fuerza, mi amor" -respondió Gael con dulzura, ajustando su agarre para asegurarse de que se sintiera cómoda.

Ella no respondió solo apoyó la cabeza en su hombro, disfrutando del gesto inesperado que añadía un toque de magia a su llegada a este refugio de amor. La risa y el amor fluyeron entre ellos, marcando el comienzo de una nueva etapa de su historia, una que prometía ser tan encantadora y llena de risas como el primer día que se enamoraron.

La anticipación crecía en el corazón de Marena mientras exploraban la casa. Cada habitación parecía susurrarles promesas de momentos inolvidables. La sorpresa de descubrir un gimnasio bien equipado ampliaba las posibilidades de su estancia, ofreciéndoles la opción de cuidar de sus cuerpos mientras se entregaban al placer de la relajación. Sin embargo, la joya de la corona era, sin duda, la zona exterior.

Al salir a la terraza, fueron recibidos por la vista impresionante de la playa privada que se extendía frente a ellos, limpia y serena. La arena dorada se deslizaba suavemente bajo sus pies mientras se acercaban a la casa. Marena admiraba la piscina que destellaba bajo el sol tropical, invitándolos a sumergirse en sus aguas cristalinas. A su lado, una cama con sábanas blancas, pensamientos comenzaron a surgir en su mente y luego miró al frente, hacia un jacuzzi que invitaba a sumergirse en aguas cálidas bajo el cielo estrellado. La promesa de noches íntimas y relajadas se materializaba en esos espacios, y Marena ya imaginaba los momentos compartidos con Gael, dejándose llevar por las sensaciones y el placer que ofrecían esos rincones paradisíacos.

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⏰ Última actualización: Jan 06 ⏰

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