𝑳𝒂 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒎𝒂𝒍𝒅𝒊𝒄𝒊ó𝒏// Al temido asesino seven se le encomendó una misión matar a Jia una mujer despiada o eso es lo que dicen los rumores, ¿será que seven pueda matar aquella mujer o ay algo más que no lo permita?
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"𝘚𝘦𝘢 𝘭𝘢 𝘥𝘪𝘴𝘵𝘢𝘯𝘤𝘪𝘢 𝘮á𝘴 𝘨𝘳𝘢𝘯𝘥𝘦,
𝘔𝘪 𝘢𝘭𝘮𝘢 𝘵𝘦 𝘴𝘪𝘨𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘱𝘦𝘳𝘢𝘯𝘥𝘰"
Después de que Jia y Seven, hablaran pasó la tarde no sentía como las otras, el miedo y la tristeza estaban comenzando a consumirla.
Seven y Shen estaban preocupados por ella ya que se había encerrado en su habitación. Seven quería estar junto a ella pero entre más intentaba la puerta esta parecía no querer ser abierta.
-Jia ábreme la puerta-Dijo al tocar la puerta- ¡Por favor!.
Más sin embargo no hubo una respuesta por parte de la joven, se escuchaban los sollozos de Jia.
-Jia, déjame pasar- Dijo tocando la puerta suavemente-.
Después de tanto insistir, ella abrió la puerta tenía sus ojos rojos y pequeños, y su nariz estaba roja. Ella lo dejó entrar; al entrar, la abrazo con mucho cariño, aunque ella no respondió al instante, después de un rato ella acepto el cálido abrazo de su amado.
-Perdón-Dijo ella con tristeza- Lamento mucho que tenga que preocuparte por mis miedos.
-De que hablas-Dijo tomadola de la mentón- me importas, por ello me gusta tenerte a mi lado.
Jia le dio una sonrisa cálida pues, el hacia que hasta en su peores momentos se sintiera mejor.
"𝐇𝐚𝐜𝐞 𝐫𝐚𝐭𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐨, 𝐘𝐨 𝐥𝐨 𝐯𝐞í𝐚 𝐯𝐞𝐧𝐢𝐫"
Paso las horas había anochecido, y el corazón de Jia aún se sentía inseguro; su mente pensaba muchas cosas no sabía ni que decirle a Seven; el problema entre Jia y su mente es que aveces su mente ganaba más que ella.
El sonido del viento acompañaba, el descanso de Jia y Seven, lo que parece ser una buena noche, parecía que no había ser así de nuevo.
Jia daba vueltas, y parecía que el sueño que tanto anhelaba tener, está noche no llegaría.
-¿Esta bien?-Dijo Seven, con una voz ronca- ¿no puedes dormir, verdad?
-No, quiero tomar un té de valeriana, recuerdo en un libro de herbolaria que sirve para relajarse y domir con tranquilidad.
-Pues te acompaño a prepararlo-Dijo levantándose- Tu me dices como hacerlo porque yo te lo prepare.
Ella se levantó junto con el, caminaron de la habitación hasta la cocina, ella le dijo como hacerlo y donde estaba, la valeriana para hacer dicho. El preparo todo y ella solo lo miraba como preparaba el té que ella tenía pensando hacerse.
Se acerco y lo abrazo por detrás, le dio un abrazo y un beso en la espalda, y después apoyo su cabeza en la espalda de Seven. El sintió la calidez de Jia, se sonrojó pero para ella ya era normal las reacciones de Seven.
-Gracias por permitirme amarte -Dijo Jia-.
El se volteo para quedar cara con ella, y abrazándola le dijo:
-No tienes que agradecerme, yo estoy agradecido por la forma en la que me amas, sin ti mi alma seria la misma de siempre, eres la nueva dueña de mis deseos y por ahora no me importa nada más que tú; por eso tendré que protegerte- Dijo cn una voz melosa-.
Y sus labios se unieron en dulce beso, que hizo que ambos, quisieran estar a lado del otro. El beso subió poco a poco de nivel, Seven bajaba hasta la cintura de Jia para tenerla más cerca de el, sus respiración se volvían más jadeantes; hasta que el ruido de la tetera los hizo detenerce.
El quito la tetera del fuego y le sirvió el té a Jia, ella lo tomó y después ambos fueron hacia la habitación.
Se encontraba relajada y segura, al estar abrazada de el hombre que más amaba la hacía sentir tan fuerte. El la arropaba en sus brazos y sus manos acariciaban su espalda haciendo que Jia jadearan de una manera suave.
Las caricias tan suaves del joven subieron poco a poco de nivel, y hicieron que ella soltara jadeos más pesados y sonoros.
Separó un poco del hombre, poso sus manos en su pecho y comenzó a quitar las prendas del hombre con delicadeza; y sus labios besaban el pecho del hombre con mucha ternura, siguió hasta llegar a los labios del hombre donde dándole una mirada apasionada, lo beso.
El beso comenzó con suavidad pero la pasión de ambos era muy grande que fue subiendo de nivel; la tomó del cuello atrayendo el cuerpo de Jia a su cuerpo, la besaba con pasión sus labios separaban y volvían a unirse.
El bajo sus labios hasta su cuello donde hizo un recorrido de besos y dejó pequeñas marcas, los besos eran húmedos haciendo que la joven jadearan, y sus manos buscaran el cuerpo de Seven.
El quito la prenda de la mujer dejandola sin nada que la cubriera, el cuerpo de Jia era iluminado por la luz de luna, los labios del hombre besaron el pecho de la mujer, por su parte ella soltaba sonidos placenteros que hacían que el siguiera besando su pecho.
La acostó con suavidad, el besaba el cuerpo de Jia con mucho amor sus manos tomaron las piernas de Jia y las abrió con delicadeza; bajo hacia la intimidad de Jia y dándole un beso en su punto dulce, comenzó a pasar su lengua sobre la intimidad de ella, sus labios besaban cada rincón de ella, mientras el hacia su cometido ella soltaba pequeños gémidos; el siguió besando con pasión, parecía que la desesperación de Seven era grande, antes de Jia logrará llegar a su clímax, se detuvo.
-¿Por qué te detienes?-Decía Jia entre jadeos-.
‐Necesito sentir tus labios-Dijo besándola-.
Sus besos estaba lleno de amor y de la pasión de los dos ambos amantes se volvieron uno solo y sus cuerpos se unieron de una manera apasionada; Seven quito las últimas prendas que le hacían falta y entró dentro de su intimidad.
Jia automáticamente puso sus uñas en la espalda de Seven aferrándose a el, sus cuerpos se unieron de tal manera que ella sintió con todo el cuerpo de él joven la tenía a su merced.
Seven siguió moviendo su cuerpo, las piernas de Jia rodearon a Seven y sus manos soltaron las manos de seven para que el las unieron junto con las de ella.
Y subió la velocidad y dándole un último beso a Jia, terminó.
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(Holi como están, perdón por no publicar estuve muy ocupada pero ya estamos de nuevo)
