BLOSSOMS IN THE OASIS LOVE

Cap 05- Dudas

En ese momento, cuando la conversación se volvía más íntima entre Seojoon y Sodam, una presencia no deseada interrumpió la escena. Era Eunsoo, una alumna conocida por su envidia hacia Sodam, que se acercó con una sonrisa falsa y una mirada afilada.

"¿Qué hacen? ¿Son novios?", preguntó con tono sarcástico, acercándose al banco donde estaban sentados Seojoon y Sodam. "¡Vamos, cuéntenme! ¿Es cierto lo que dice Han Kyungsoo? Porque, sinceramente, parece que es muy cierto, Seojoon. Sodam, ¿no notas cómo Seojoon te mira fijamente a los ojos y luego a tus labios?"

Las palabras de Eunsoo resonaron con una intención claramente despectiva. Sus ojos recorrían a Sodam con una mirada llena de envidia y resentimiento, mientras intentaba sembrar la duda entre ellos.

Sodam, desconcertada por la interrupción inoportuna, trató de mantener la compostura. Su rostro reflejaba una mezcla de incomodidad y desaprobación por la presencia de Eunsoo. Por otro lado, Seojoon se sentía incómodo ante la mirada de Eunsoo y las insinuaciones que trataba de provocar.

"No, no es lo que estás pensando", respondió Sodam con firmeza, intentando disipar las malas interpretaciones. "Solo estamos conversando, no es como dices."

Seojoon, con una expresión seria y un tono de voz más firme, trató de poner fin a la situación. "Eunsoo, no es apropiado... no es necesario que hagas este tipo de comentarios".

Eunsoo, ignorando las advertencias, continuó con su actitud provocativa. "Claro, como si no fuera evidente. Bueno, no me malinterpreten, solo trato de ayudar. Pero vamos, todos sabemos la verdad, ¿no es así?"

El incómodo intercambio dejó a Sodam y Seojoon en un estado de perplejidad. Las insinuaciones de Eunsoo habían generado una atmósfera incómoda y tensa, y ambos estudiantes buscaban una salida para deshacer el malentendido.

Lidiando con la incómoda situación creada por Eunsoo, Seojoon y Sodam intercambiaron una mirada preocupada. Ambos compartían una sensación de disgusto por la actitud de Eunsoo y la intrusión en su privacidad.

"Sodam y yo solo estamos conversando, Eunsoo. No hay nada de lo que estás insinuando", declaró Seojoon con determinación, intentando disipar las especulaciones sin fundamento de Eunsoo.

Las palabras de Seojoon fueron recibidas con un asentimiento de Sodam, quien, con una voz tranquila, intentó poner fin al malentendido: "Es cierto, no hay nada más que una conversación amigable entre nosotros aquí".

Eunsoo, persistente en su actitud provocativa, se burló con una risa socarrona. "Oh, claro, claro. Solo son conversaciones amigables", dijo con ironía, mientras se alejaba dejando una atmósfera tensa tras de sí.

Sodam y Seojoon, aliviados por la partida de Eunsoo, intercambiaron una mirada de complicidad. Ambos compartían la molestia por el desagradable encuentro y la insistencia de Eunsoo en generar confusión.

"Lo siento, Sodam. No esperaba que algo así sucediera", se disculpó Seojoon con un gesto de preocupación.

"No tienes por qué disculparte, Seojoon. Eunsoo... ella suele ser así", respondió Sodam con una sonrisa tranquila, tratando de aligerar la tensión del momento.

Seojoon, después del incidente con Eunsoo, se encontraba sumido en un mar de dudas y pensamientos confusos. Las palabras de Eunsoo y los comentarios de sus compañeros resonaban en su mente, sembrando la semilla de la incertidumbre.

A pesar de la tranquilidad que intentaba mostrar frente a Sodam, una pregunta persistente se apoderaba de su mente: ¿realmente gustaba de él? Todos parecían estar convencidos de esa verdad, pero Seojoon no estaba cien por ciento seguro.

Los susurros y murmullos en los pasillos se habían vuelto más evidentes desde el encuentro con Eunsoo. Cada mirada, cada gesto, cada sonrisa de Sodam parecía tener un significado diferente a los ojos de los demás.

Seojoon, sumido en sus propios pensamientos, se esforzaba por comprender los indicios que señalaban hacia una posible atracción de Sodam hacia él. Recordaba cada encuentro, cada gesto, tratando de descifrar señales que pudieran confirmar lo que todos aseguraban.

Sin embargo, por más que intentara interpretar las situaciones pasadas, no podía evitar la duda persistente. ¿Y si se equivocaban? ¿Y si todas esas señales eran malinterpretadas o simplemente producto de la amistad?

La confusión de Seojoon era palpable. Se sentía dividido entre los comentarios que escuchaba y su propia incertidumbre. En un intento por aclarar su mente, decidió tomar distancia por un momento y reflexionar sobre sus sentimientos y las señales que había recibido.

Luego del incidente con Eunsoo y la marejada de pensamientos confusos que invadían su mente, Seojoon decidió dar un paseo solitario por el patio del colegio. El rumor persistente sobre los supuestos sentimientos de Sodam hacia él y la insistencia de sus compañeros de clase habían dejado su corazón y su mente sumamente agitados.

Mientras caminaba, absorto en sus propios pensamientos, Seojoon no pudo evitar chocar con alguien. El impacto fue ligero, pero lo suficiente como para interrumpir su trance mental. Al levantar la vista, se encontró con los ojos de Sodam.

—¡Lo siento mucho! No estaba prestando atención a mi alrededor —se apresuró a disculparse Seojoon, notando a Sodam con una leve sonrisa de comprensión.

—No te preocupes, no pasa nada —respondió Sodam con amabilidad, devolviéndole la sonrisa—. ¿Estás bien?

Seojoon asintió, agradecido por la comprensión de Sodam. Una charla casual surgió entre ellos, y, aunque Seojoon intentaba no volver al tema que lo inquietaba, no pudo evitar que su mente regresara a los rumores que rodeaban a Sodam y a él.

La conversación con Sodam lo hizo sentir un poco más tranquilo, pero las dudas persistían. Después de un rato, Seojoon se excusó con un gesto y decidió alejarse para dar un paseo solitario. Mientras caminaba, pasó cerca de donde Sodam estaba con algunos de sus compañeros.

En ese momento, Seojoon no pudo evitar escuchar parte de una conversación. Hyungwoo, uno de los compañeros de Sodam, parecía dirigirse a ella con cierta preocupación en su tono.

—Sodam, ¿escuchaste lo que Eunsoo y todo ese grupito están diciendo de ti, no? —mencionó Hyungwoo, con un tono serio y protector.

La mención del nombre de Eunsoo y el grupo de estudiantes que constantemente generaban rumores inquietó a Seojoon. ¿Qué podrían estar diciendo sobre Sodam? La preocupación se adueñó de él mientras continuaba su caminata, intentando entender la situación sin ser intrusivo.

La frase de Hyungwoo había sembrado una semilla de inquietud en la mente de Seojoon. La curiosidad y la preocupación lo abrumaban, y aunque sabía que no era apropiado interferir en asuntos personales, no podía evitar sentirse inquieto por la situación de Sodam.

"Si, si, ya lo sé", murmuró con pesar mientras se alejaba del grupo, caminando lentamente y con la mirada fija en el suelo. La inquietud y la tristeza eran palpables en su gesto, y aunque intentaba ocultar sus sentimientos, no pudo evitar sentirse afectada por las palabras que había escuchado.

Decidió alejarse de la multitud y dirigirse hacia los cerezos que se alzaban detrás del colegio. Con paso pausado, buscó un lugar tranquilo y se sentó junto a la fuente de agua cristalina que fluía con una melodiosa serenidad. El sonido calmante del agua parecía ser el bálsamo que necesitaba para calmar su espíritu agitado.

Se sumergió en sus propios pensamientos mientras observaba el reflejo del agua. Sus emociones eran un torbellino interno, pero trataba de encontrar algo de paz en ese rincón apartado. Cerró los ojos por un momento, buscando tranquilidad y tratando de encontrar una forma de lidiar con los rumores y las preocupaciones que inundaban su mente.