Nuevamente Noah se encontraba en su casa desayunando, disfrutaba de una chocolatada con sus hermanos. Mientras su madre contenta aprovechando su día libre, se tomó el trabajo de hacerles el almuerzo para llevar.
- No era necesario que me prepares, la vianda a mi también, mamá. - Mencionó apenado Noah al rascarse la nuca.
- No te preocupes, el almuerzo que venden allá tenía precios altos. - Aclaró al tomar el almuerzo envuelto en una tela y dejárselo en la mesa. - Como siempre digo, es mejor la comida de casa.
La cálida sonrisa de toda madre, reconforta a cada hijo, a Noah amaba ver a su madre feliz y junto a sus hermanos gemelos lo hacían sentir en casa. Debido a la salud de su madre, y las circunstancias en las que viven Noah y los niños siguen estudiando mientras que su madre enferma o no trae el pan de cada día.
Eso entristece a Noah en varias ocasiones, pero siempre la recibe con la cena y eso hace que el ambiente sea más bello. Tomo su almuerzo saludo a su madre y hermanos de un beso en la mejilla y se retiró de la casa rumbo a la escuela.- Te notó se fue humor, Sweetie ¿Ocurrió algo y no me había enterado?- Preguntó mientras caminaba de la mano con su amiga fantasma al cual iba tarareando una canción.
- Nop, me siento bien hoy. - respondió con una sonrisa mientras seguía tarareando su canción.
- Me parece bien. - le devolvió la sonrisa y siguieron su camino.
Me tras caminaban Sweetie siempre le contaba sueños y recuerdos que tenía de vez en cuando, sus comidas favoritas y cada avión que veía.
Al entrar al instituto, Sweetie se soltó del agarre de Noah y esté entro en pánico ya que vio está correr por el pasillo. Sorprendido la siguió de manera discreta ya que era muy temprano a la hora que había asistido y apenas había alumnos recorriendo los pasillos.
Al escuchar un puerta cerrarse a su costado, volteó y cuando quiso seguir la persecución de su amiga, está ya no se encontraba por ahí.
- Al menos estaba de buen humor. - Bufo al dar un suspiro pesado.
Mientras caminaba por los pasillos disfrutaba el oír de los pájaros cantar y el silencio que había en los pasillos. Escuchó una voz conocida en la sala de juntas del Centro así que decidió seguirlo << es Sweetie, debe estar ahí>> pensó al abrir la puerta y no encontrar a nadie en la sala, el tarareo sñ había vuelto su compañera Adeline había salido del depósito tarareando la canción.
Noah se pellizco la mejilla para saber que no era un sueño << parece la misma canción que tarareaba hoy Sweetie.>> Sacudió la cabeza desvaneciendo esas ideas y saludo cortésmente a su compañera.
Adeline sorprendida por ver a su compañero tan temprano, recordando lo sucedido ayer se limito a dirigirle la palabra. Sin embargo, aún en esas circunstancias Noah no perdió la esperanza en poder arreglar las cosas.- El clima cambio bastante ¿No?- Mencionó Noah al dejar su mochila en la silla. - El calor del verano se está empezando a sentir.
Acompañó su frase con una leve risita, Adeline por su parte se mostraba fría <<ajá>> respondió sarcásticamente al dejar las carpetas amarillas para la junta en la tarde.
Noah, al obtener esa respuesta poco amable por su compañera se molestó un poco.
- Oye, disculpa de verdad por ayer solo intentaba ayudar. - Declaró Noah frunciendo el cenó.
- Mucho no ayudaste, mi casillero quedó un desastre total. - Musito Adeline al darle su carpeta.
- Ya ya, encerio es molestó que te lo tomes así.
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El hiló que nos unió
Romance¡Hiló rojo que ha juntado a nuestros dos protagonistas! pero el alma gemela de nuestra protagonista ha cambiado de rumbo y viene con todo ♥️💪