1 de septiembre d 2023.
Septiembre y con eso venía mi cumpleaños, mañana cumplía 24 añitos, mi número favorito jeje.
Nunca me había gustado mucho cumplir años, peeero bueno.. Mi papá estaba contando los días para que hagamos un asado en casa y yo ya le había dicho que sí.
—¿entonces es hoy o mañana?— me pregunta Candela porque hoy después de las doce ya era mi cumpleaños y mi papá había ofrecido también esa opción y levanto mis hombros.
—a mi me da igual, pero me dijo que ya le tengo que confirmar. Me da paja que vayan mis tíos y eso que no los veo nunca— estaba segura que mi papá los iba a invitar.
—si lo haces hoy podemos salir mañana— dice ella haciendo un bailesito feisimo y me río.
—bailas bien eh— dice Enzo Díaz y las dos miramos a la puerta media entreabierta para ver a nuestros Enzo y yo me río fuerte, mientras Candela por supuesto esta rojisima.
—¿ahora me hablas vos? y encima para descansarme— dice ella haciéndose la mala pero todos sabemos que se muere por el. Y el por ella, obvio, era raro que se la haga tan difícil, después de lo de aquella vez de Paulo.
—¿me dejan hablar con Juli? vayan a pelearse afuera— dice Enzo y se acerca a donde estoy yo para dejar un beso en mi frente.
Los otros dos se van para afuera y Enzo se sienta donde estaba Candela anteriormente.
—escuché que tu papá estaba invitando a Pinola y Zucu a tu cumpleaños— dice burlon porque ya le había contado estos días que odiaba.
—¿a vos no te invito por casualidad?— lo molesto y el niega.
—hacelo hoy, come hoy con ellos— dice y hago una mueca arrugando mi frente.
—¿por?
—así mañana nos vamos juntos, lejitos, por el sábado y domingo, es mi regalo para vos— dice y se me iluminan los ojos, la cara y la vida.
—que hambre, deja de mentir– le digo empujándolo un poco pero el me mira serio.
—en serio bonita, mañana te paso a buscar, llévate ropita para dos días— dice y no me aguanto mucho más, salto arriba de el y le doy un beso en los labios. El me agarra de las caderas para que no me caiga y sonríe.
—holaaa– dice Barco cuando entra seguido por Candela y Enzo y yo me levanto de arriba de Enzo y Barco vira los ojos.
Me saluda y se sienta en una silla libre.
—¿hoy o mañana comemos en tu casa?— me pregunta y arqueo una ceja porque ni lo había invitado.
—nosotros dos vamos igual— Enzo Diaz se abraza con el y me río.
—hoy— digo mirándolo a Enzo y el sonríe con la boca apretada. Candela me mira achinando sus ojos.
Demichelis los llamó asique los chicos se fueron a entrenar.
—¿cómo te decidiste en dos minutos que era hoy?– pregunta la morocha y me río.
—Enzo me dijo que mañana nos íbamos de viaje, bueno dos días, pero por mi cumple— digo embobada y ella pega un gritito.
—¿me estas jodiendo?!!– dice y me abraza.
—asi que voy a decir que me voy con vos de viaje, te aviso así no metes la pata– le digo y ella se ríe fuerte.
Salí del trabajo y cuando llegue a mi casa, ya estaba mamá, que le había dicho al portero que la deje pasar, pues según ella tenia que hacer ensaladas, picada, traer snacks y cosas dulces.