La maldición de la Reina Malvada finalizo, después de veintiocho años le venda que cegó a todo Storybrooke al fin se había quitado y todo gracias a La Salvadora. Todos los personajes de los cuentos clásicos se reunieron con sus familias y gozan de s...
Seguramente, Henry podría haber ideado un nombre más ingenioso, pero en estos momentos mi imaginación es limitada. Estoy parada junto a Killian frente a la casa del Sombrerero. ¿Por qué, se preguntarán? Pues, para que el Calavera alce el vuelo, necesitamos polvo de duende, y ese hombre extravagante (por no decir loco) es el único que lo posee en este momento. No intentaremos hacerlo por las buenas, Emma ya lo intento y recibió un puñetazo en la cara, se suponía que solo iría yo, pero al parecer el Capitán Garfio quiere vengar a su amada. Qué bonito es el amor, ¿verdad?
-"¿Cuál es el plan?" –Me pregunto y yo lo vi con confusión. –"Vamos, tu eres la ladrona profesional, yo puedo robar embarcaciones. Pero esto" –Señala la casa. –"Es tu territorio y por lo tanto, por ahora eres mi Capitán"
-"Bien" –Acepte mi puesto. –"El Sombrerero no tiene magia, así que para nosotros es una total ventaja. Sera fácil" –Asegure observando la vivienda. –"Si queremos saber por dónde hay que entrar, primero tenemos que saber dónde está el enemigo y el objetivo"
-"El polvo está en su bóveda junto a todos los sombreros. Es subterránea" –Asentí comprendiendo y maquinando un posible plan. –"El en este momento está tomando una siesta en su dormitorio" –Murmuro viendo por su telescopio.
-"Ese estaba en la tienda" –Comente viéndolo con detalle. –"¿Por qué se lo cambiaste?"
-"No eres la única que le roba cosas a Gold" –Me dijo guardando su telescopio en el bolsillo interior de su saco. –"No te distraigas, sígueme contando como planeas hacer el robo del siglo"
-"Perdón" –Me disculpe no sé porque lo hice, nunca lo hice en mi vida. –"Nunca hago planes, vivo de la improvisación" –No era mentira, para robar la tienda de antigüedades fue todo muy espontaneo, tal vez por eso me atraparon. –"Ambos ingresaremos por la ventana del baño, pero uno cerrara la puerta del baño porque está conectada a su habitación y otro cerrara la puerta de esta ultima"
-"¿Qué pasa si quiere romper su ventanal para escapar?" –Me pregunto y mierda que no había pensado en eso. –"¿O que intente derribar alguna de las puertas?
-"Uno de nosotros tendrá que quedarse a vigilar entonces" –Levante mi puño y ahora él es el confundido. –"Piedra, papel o tijeras, el que pierde se queda a vigilar"
-"Es injusto" –Frunció su ceño. –"Tengo que recordarte que tengo una mano menos"
Sonreí ante su contestación, ya me imaginaba que podría decirme algo como eso. –"¿Por qué crees que te estoy mostrando una sola mano?" –Alce y baje mi mano. –"¿Qué pasa Jones? ¿Huelo miedo?"
No tuve que decírselo dos veces, en cuestión de segundos ya estábamos jugando, pobre Killian, siempre fue predecible en estas clases de juegos, tiene un patrón, hace tijera, después papel y por ultimo piedra. Al tratarse de una sola ronda solo queda que haga la primera opción.
Dicho y hecho.
Tijeras.
-"¡Maldición!" –Me ve con reproche, indignado por no haber ganado. –"Buen juego Capitana Kira" –Me estiro la mano. –"Pero no te acostumbres a la victoria"
-"Lo tendré en cuenta" –Pobre pirata, si el supiera. –"Capitán Garfio"
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