Flor de tres petalos

#10 Comienza el juego

P     E     T     E     R

He tenido una infinidad de aliados y seguidores leales a mí, pero Devin sin duda se ha convertido en un miembro que resalta por su astucia y por hacer todo lo que este a su alcance y más con tal de cumplir cada uno de mis deseos. Hoy le ordene que permitiera que Henry lo hiriera, con tal de que el corazón creyente comenzara a sumergirse en el camino de la soledad; hermosa fue mi sorpresa cuando hace un par de segundos su tropa regresaba del entrenamiento y pude distinguir un corte en su mejilla. Sé que esto provocará burlas por parte del resto del campamento, pero son detalles con los que deberá de enfrentarse, después de todo, es solo una pequeña consecuencia que recibió para satisfacerme.

Otro seguidor leal que debo de resaltar, es Félix, quien ha estado dispuesto a recibir cortes en su rostro con tal de defender mi nombre, incluso ahora, es una ficha muy importante en mi tablero, es mi mensajero personal. Se encarga de enviar mensajes por mí y recibirlos, él se convirtió, junto con su tropa en los encargados de vigilar a nuestros jugadores desde las sombras, nadie puede verlos y tampoco deben de interferir en sus jugados. Solo actúan si yo así lo ordeno.

Todo está saliendo acorde al plan, mis niños perdidos siguen nuestro pequeño teatro al pie de la letra, es fascinante como se puede jugar con la mente de alguien tan creyente como Henry. Y por otro lado se encuentra su familia, quienes ya han aceptado sumergirse en mi tan interesante juego, sé que no creen en mi y también estoy al tanto que ya descubrieron para que necesito con tanta urgencia a su pequeño; pero eso no será un impedimento para coronarme victorioso. Es hora de presentarme formalmente y mostrarles el primero desafío que deberán de superar para ver qué bando se convertirá en el portador del corazón del único creyente verdadero.

Los persigo desde las sombras, estoy volando entre los arboles pero ellos no logran verme, reconozco a casi todos ellos, excepto a una, quien supongo que es Kira, la chica que menciono Félix, no mintió, es realmente atractiva para ser una simple mortal. Pero con ella no me interesa en este momento, se que vino a mi tierra con otro propósito y si no interfiere en mis planes, tal vez la deje vivir. Tengo a Henry en mi hombro, se desmayado gracias a un poco de polvo para dormir, cortesía de Tinkerbell.

Capitán Garfio.

La Reina Malvada.

La Salvadora.

Bellatrix.

¿Cómo se esto último?

Consideremos las muchas ventajas que conlleva ser el primer habitante de Nunca Jamás. Una de las notables comodidades de esta posición única, es mi capacidad para estar al tanto de todos los acontecimientos que tienen lugar en este mágico reino. La sensación de estar en sintonía con cada susurro de la brisa, el murmullo de los arroyos y los secretos susurrados por los árboles añade una dimensión especial a mi experiencia cotidiana. 

Además, el don de poder materializarme instantáneamente frente a cualquier individuo con solo concentrar mis pensamientos agrega un toque fascinante a mi existencia aquí. Cuando pienso en alguien específico, mi presencia puede manifestarse de manera mágica ante ellos en un abrir y cerrar de ojos. Este poder no solo me otorga un dominio sobre la distancia, sino que también intensifica mis conexiones personales al permitirme interactuar de manera directa y cercana con quienes comparten este reino de ensueño.

-"Espero que las comodidades de mi isla cumplan con sus expectativas" –Dije en voz alta a la vez que abandone las sombras de los arboles. Permitiendo que la luz de la luna me ilumine. –"Capitán, es un gusto volver a verlo" –Incline mi cabeza a modo de saludo. –"Lastima que optaste por el bando erróneo, esperaba más de ti"