#12. Que se joda el mundo.

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Freen fue la primera en sumergirse en la piscina con un clavado magnífico y emergiendo como si de una diosa se tratara. Rebecca estaba completamente hipnotizada. Bajo la atenta mirada de Freen, bajó las escaleras lentamente, hasta estar a la altura de la castaña. Las puntas de su corto cabello humedecidas.

-Fresca, ¿cierto?.- preguntó la más alta, caminando para acercarse a Rebecca.

-Así es.

Ambas caminaron hasta una parte de la piscina dónde su tren superior quedaba fuera del agua, Freen se recostó a la pared de la piscina colocando sus brazos en la orilla, mientras veía como Rebecca se hundía completamente para mojar el resto de su cabello y emergía entreabriendo los labios en un jadeo. Era la escena más sexy que había visto.

Con su torso fuera del agua, Becky peinó su cabello hacia atrás para luego liberar su rostro de la humedad. Lo que no había notado era que la tela del top al estar mojada, se pegó mucho más a su piel, no sólo marcando sus duros pezones sino también haciéndolos verse a través de la tela mojada. A Freen se le hizo agua la boca y no podía apartar la vista del pecho de la más pequeña, cosa que Rebecca notó al verla. Sonrió con picardia, dando un par de pasos más cerca de Freen, la aludida tragó profundo.

-¿Te gusta lo que ves?.- preguntó con una voz ronca y lenta que hizo que Freen sintiera escalofríos.

-Lo siento, no debe...

-No me molesta que me veas, Freen.- se encogió de hombros.- lo que me molesta es que aún con toda esta tensión sexual que tenemos, ninguna de las dos haya hecho algo al respecto.- la más alta respiró con dificultad, porque era cierto, entre ellas había mucha tensión sexual.- sé que te gusto tanto como tú me gustas a mí, pero no sé porqué me huyes.

Rebecca dió otro paso más, quedando muy cerca de Freen, si estiraba su brazo, podía tocarla, pero no lo hizo porque notó lo tensa que estaba ella. Y que bueno que no lo hizo, porque Freen no soportó más la tensión y se alejó rápidamente para subir las escaleras y salir de la alberca con velocidad. Becky frunció el ceño e hizo una mueca de disgusto, le había vuelto a huir. Sabía que debía ser paciente con Freen, pero deseaba tanto poder acercarse.

-Yo... también siento esa tensión.- dijo Freen sentándose en la orilla de la piscina con la botella de vino en su mano.

Se sentía impotente porque los nervios podían con ella y por más que quería acercarse a Rebecca, algo dentro se lo impedía. Quizá era el hecho de que por un segundo le encontró mucho parecido a la castaña con Richie y el sentimiento de que estaba haciendo algo malo.

-Pero... yo n-nunca... nunca he sentido esto con otra mujer.- comentó apenada tomando un trago directo de la botella.

-Oh, es eso.- Rebecca le dedicó una sonrisa tranquilizadora y se acercó nuevamente a ella, a una distancia prudente.

-No voy a mentirte, desde que te vi en la cafetería... me pareces una mujer preciosisima.- tragó profundo, aprovechando el valor que le estaba dando el vino para hablar.- y causas cosas en mí, que nadie antes ha causado...- tomó otro sorbo de vino.- ni como negar que me enciendes con sólo una mirada o una sonrisa.- bufó.- es que no entiendo cómo alguien puede ser tan sensual.

-Debo confesar que me siento halagada.- sonrió mordiendo su labio inferior.- oír eso de una mujer tan hermosa y sexy como tú, es un honor.- dió un par de pasos acercándose de nuevo a Freen sin dejar de sonreír con su labio entre sus dientes.

-¿Ves?.- suspiró mordiendo su labio inferior.- es esa sonrisa y esa mirada... me haces sentir...- cerró los ojos un segundo y suspiró nuevamente.- es como si tus ojos me desnudaran.

Call of Love [FreenBecky]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora