-Yeonjun debes de creerme lo que te digo... yo realmente te...
-¡No! ¡No lo digas! -Mis ojos se llenan de lágrimas y siento mi corazón romperse. -No está bien decir te amo cuando amas a otra persona ¡No es correcto decir palabras que no sientes! .
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Los días después de eso fueron simplemente buenos. Aunque los ensayos seguían ocupando la gran parte de mi día siempre había tiempo para poder leer los mensajes que Changbin me mandaba.
Sus mensajes eran dulces. Todas las mañanas me despertaba con un "Buenos días, espero que tengas lindo día, lo estas haciendo bien" por las tardes otro mensaje era mandado "¿Ya comiste? Recuerda comer" y en las noches simplemente platicabamos de cosas tribales. Desde cosas tan básicas como que habíamos comido a platicar sobre nuestro día a día. Algunas veces salía de mi habitación y caminaba a un lugar seguro donde los demás integrantes no me encontraran para poder hacer videollamada con él.
— Te ves muy cansado ¿pasa algo? —Susurro mientras observo a Changbin algo distraído y decaído.
— Oh... no es nada —Puedo percibir su voz rasposa y algo pesada. —Solo que las cosas en el grupo no están yendo bien.
—¿Grupo?, ¿Tienes un grupo? —Digo confundido al escuchar aquello, sabía que Changbin producía música porque él mismo me lo había dicho, pero nunca mencionó algo más haya de eso.
–No, no tengo un grupo, pertenezco a uno– aclara él —¿Realmente no lo dije? —Su rostro parecía confundido pero después se río.
–No, jamás me lo dijiste — Entre cierro mis ojos mientras hago un puchero.
— Supongo q lo olvide, las cosas han estado complicadas desde el debut.
–¿Cómo? ¿Ya debutaron?– preguntó sorprendido — ¡Porque no me dijiste nada!- le reclamo por olvidar tan importante detalle.
Conozco mejor que nadie la presión que cae sobre los idols, el debut es algo muy importante y de lo que depende casi toda tu carrera, Changbin debía de estar tan o más presionado que yo y nunca lo supe, tal vez estaba siendo alguien demasiado molesto.
— Así es, aunque realmente es muy poco tiempo lo que llevamos como grupo, la compañía nos dejó a nuestra suerte y estamos haciendo todo lo que podemos pero a veces parece que simplemente pasamos desapercibidos, no importa que tanto nos esforzamos.
Changbin ríe ligeramente pero claramente se nota lo presionado que esta, que la estaba pasando mal y yo no sabía cómo ayudarlo, me sentía impotente. Apreté el celular con todas mis fuerzas y sentí un nudo en mi garganta que me impedía hablar.
Se fuerte Yeon Jun
— ¿Puedo invitarte un café? —Las palabras salieron por si solas —Yo invito.
La última vez Changbin me había consolado y era mi momento de demostrarle que no estaba solo que yo también podía ayudarlo en sus momentos más difíciles,
Changbin parece un poco sorprendido por mi invitación aun así una sonrisa sincera se formo en sus labios.
