Cicatrices de Octubre

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17| Sonrisas por mensaje.

"¡Fotos exclusivas! ¡Un infiltrado en la fiesta de ayer ha logrado maravillarnos con el momento exacto en el que comparten un momento íntimo! Y no hay duda para nadie."

Carlie:

Siempre arruino mis propias victorias.

Cada vez que logro algo, soy incapaz de encontrar las cosas buenas, solo me concentraba en las cosas malas. Era un problema. Un problema para el que, por desgracia, no encontraba una solución.

Entré en el avión después de más de diez minutos de sentir los cuerpos de los periodistas pegados al mío. Con desagrado, seguida por William y Landon, me senté lo más alejada posible del resto de pasajeros.

Ver el amanecer y el atardecer eran como una especie de bebida de la que me empapaba y por alguna razón, siempre me llenaba de inspiración. Eran mi musa, mi droga, mi subidón de adrenalina.

Comencé a revisar algunos documentos que Miller me pidió que le diera mi opinión al respecto. Se trataba de la segunda visita de algunos diseños, los habían analizado y me habían enviado sus opiniones y las cosas que podría cambiar.

Saqué del bolso mi libreta de bocetos y busqué el primer boceto del documento para proyectar sus opiniones y ver si tenían sentido o era mejor dejarlos tal cual.

Un mensaje hizo que mi concentración se dispersara durante unos segundos.

Lo encendí con la idea de que sería una nueva reunión o algún archivo más por parte de Miller para encontrarme con todo lo contrario.

Sé que esto no está en el contrato, pero ¡quería desearte buena suerte! Es una gran oportunidad ir a la semana de la moda en Alemania. Espero que lo disfrutes y no pienses en creer que no lo mereces. Si lo haces, más que nadie. ;)

Una sonrisa tiró de mis labios inconscientemente. Cuando me di cuenta, chasqueé con la lengua y traté de mentalizarme de que no estaba sonriendo.

Pero fracasé. Y sonreí. Sonreí ingenuamente al pensar que él había decidido dedicarme unas palabras de apoyo aun sin tener nada que ver con el contrato. Era... un gesto muy bonito.

Comencé a bocetar en mi cuaderno a la espera de que mi cabeza se disolviera de tantos pensamientos que no quería tener presentes. Los trazos salían solos como si fueran hechos con despreocupación y es que así era. Quería que fluyeran, que salieran solos y no conseguí hacer nada.

Eran solo líneas aleatorias las cuales no podía unir, era como si mi mano dejara de funcionar. Deje el lápiz a un lado y mire por la ventana mientras el avión sobrevolaba las montañas europeas.

No comprendía lo que me estaba pasando hoy.

Parecía como si hubiera decidido específicamente hoy, tener los pensamientos dispersos. Dejados al azar, sin ningún orden. Y no me gustaba nada.

Soy una persona de reglas, controladora y muy fiel seguidora de cualquier plan que tuviera la oportunidad de seguir. Mi vida no estaba compuesta de planes dispuestos a tener que improvisar. Odio improvisar.

Se me daba demasiado mal y me sentía insegura al no tener todo bajo control.

Dos horas más tarde, sentí como si alguien me estuviera tocando el brazo y al girarme me encontré con el cuerpo de Landon mirándome de brazos cruzados. Me quité los auriculares para escucharle hablar.